Las 7 cosas que toda persona con preocupaciones ambientalistas debe saber sobre los corales y su alarmante degeneración

Uno de los conjuntos de ecosistemas más bellos e interesantes del planeta está en peligro por su blanqueamiento o decoloración, que es el proceso degenerativo que lo lleva a la extinción. Estas son las 7 cosas que debes saber sobre las fantásticas estructuras coralinas y su preocupante situación actual.

7. Las formaciones coralinas

Un coral es una colonia de pequeños animales, pólipos en su mayoría en el rango de los 2 a los 10 milímetros de tamaño. Forman los llamados arrecifes coralinos, entre los que se encuentran los dos quizá más conocidos, la Gran Barrera de Coral australiana y el Arrecife de Mesoamérica en el Caribe. La Gran Barrera es el arrecife coralino más grande del mundo. Está localizado al noreste de Australia y se extiende por cerca de 2600 kilómetros, siendo una de las pocas estructuras naturales visibles desde el espacio. Es llamada « el animal más grande del mundo», aunque su mayor parte está constituida por esqueletos de corales.

6. El animalito de los corales

Los animalitos que se van uniendo colonialmente en cientos de miles para formar un coral son antozoos, que conforman también a las anémonas y las plumas de mar, aunque pueden vivir individualmente. Se alimentan principalmente de las algas que crecen en el mar por fotosíntesis (por eso los corales están generalmente a poca profundidad y en aguas claras). Cuando los pólipos mueren, queda su esqueleto, formado básicamente por carbonato de calcio, que le da el color característico al coral extinguido o blanqueado y va formando los arrecifes.

5. El infaltable calentamiento global

El calentamiento global está afectando la vida en todo el planeta, pero uno de los organismos con los que más se está ensañando es precisamente con el coral. En nuestro artículo La temperatura del planeta sube de manera preocupante: el primer semestre de 2015 fue el más caliente de la historia, señalamos que 2015 impondrá casi con seguridad records de temperatura tanto en la tierra como en el mar. El crecimiento de la temperatura puede matar. Es lo que está ocurriendo, a escala casi microscópica, con los corales, en lo que se conoce como « estrés coralin»; sencillamente los antozoos están muriendo de calor. Son animales muertos en masa, pero poco visibles por no decir invisibles, por lo que no suelen causar alarma.

4. La acidificación del mar

Toda moneda tiene dos caras. Es bueno para el ambiente que el mar absorba dióxido de carbono, pero las reacciones químicas que se producen durante la absorción acidifican el océano. El pH del mar, que desciende muy lentamente de manera natural, ahora es también ayudado por la mayor presencia de dióxido de carbono en la atmósfera debida a la creciente contaminación ambiental. Los cambios en el pH del mar parecen muy leves, pero tienen graves consecuencias para algunas formas de vida. En la era preindustrial se estima que el pH marino era de 8,18 y que para 2050 estará en torno a 8,00. Los seres vivos que más sufren con esta creciente acidificación del mar son los organismos calcáreos, entre los que se encuentran los corales.

3. La falta de comida

Todos sabemos que el hambre puede matar, pero cuando estamos en una playa, cerca de algunos corales, no solemos imaginarnos que quizá en ese preciso momento una parte de esa colonia de microorganismos esté muriendo de hambre. Y no es que los corales sean demasiado exigentes con el yantar. Pueden ingerir tanto zooplancton (comida animal) como fitoplancton (comida vegetal), aunque su principal alimento son las algas unicelulares. El deterioro del mar también está contribuyendo a poner la pitanza difícil a los corales.

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2. En medio del peor desastre coralino

La preocupación mundial por el blanqueamiento del coral es relativamente reciente y su estudio sistemático comenzó apenas a finales de la década del 90. Expertos en el tema, pertenecientes a la Administración para la Atmósfera y los Océanos, de Estados Unidos y a la Universidad de Queesland, en Australia (principal país doliente por el deterioro de la Gran Barrera) estiman que estamos en medio del episodio más grave de extinción coralina desde que se inició un monitoreo formal del tema. Y lo que es más preocupante, no se tiene claro qué alcance podrá tener, ni cómo mitigarla, aunque se cree que está principalmente ligada al calentamiento global.

1. ¿Un mundo sin corales?

Los arrecifes de coral constituyen inmensos ecosistemas, con una de las mayores densidades y variedades de vida en el planeta. Miles de especies están en riesgo por su declinación, así como la protección de amplias franjas costeras y el modo de vida de muchos de sus habitantes. Sin olvidar que la entretenida actividad del buceo, para la que los arrecifes coralinos son verdaderos paraísos, tendría poco sentido en un ambiente con poca vida.