5 cosas que NO nos gustan de las relaciones "por Whatsapp"

Las nuevas tecnologías han revolucionado el mundo de las relaciones: desde tweets hasta webs de ligue, o de publicaciones en Facebook a apps como Whatsapp, el mejor prototipo de relación monotorizada que nos permite saber, al momento, si esa otra persona ha leído un mensaje, si le ha llegado y no lo leyó o, quizás lo peor, que se haya conectado hace 4 minutos, haya leído tu mensaje y no haya contestado.

Quebraderos de cabeza propios del siglo XXI que alimentan un artículo en el que te confesamos esas 5 cosas que no nos gustan de las relaciones por Whatsapp.

Restan responsabilidad

Antiguamente, una simple llamada de teléfono servía para dar pie a una cita y saber que esa otra persona, ante la imposibilidad de comunicación portátil, estaría allí en el momento acordado.

También es cierto que, años atrás, la gente parecía más responsable que en un siglo XXI en el que las nuevas tecnologías y, especialmente, apps como Whatsapp, nos permiten cancelar, atrasar o, básicamente, ser algo menos serios a la hora de un encuentro. 

El poder del emoticón

Expresar "te quiero" con un ícono, enviar una rosa vía Whatsapp o escribir esas palabras que no tienen el mismo sentido que las confesiones cara a cara.

Y es que, este tipo de apps parecen plastificar los sentimientos, servir como perfecto escudo a la relación que deberíamos tener "en el mundo real".

Algo tan triste como, por otra parte, efectivo para los más tímidos... o perezosos.

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Una terraza con vista...

... salvo que nosotros no las disfrutamos. Tampoco a la persona que tenemos enfrente y que, ¡sorpresa!, también yace cabizbajo toqueteando su smartphone.

Whatsapp obra la difícil osadía de hacer que personas que salen para sociabilizarse lo hagan posteriormente sentados en un café con la mirada pendiente de un chat en lugar de hablar de la vida, las experiencias, sonreír o juguetear con el hombre que se encuentra delante de sus mismas narices.

Demasiado control

Como bien enunciábamos en la introducción, Whatsapp marca la última hora a la que se conectó tu chico, si le llegó y si leyó tu mensaje o no. Características competentes que nos pueden volver totalmente locos, celosos y psicóticos cuando, realmente, quizás no tuvo realmente el tiempo necesario para contestarnos.

De hecho, ya existen apps que manipulan el calendario y horario que marca Whatsapp, quizá para distraer a esa esposa o novio demasiado controladores.

Aún más rutina

El hecho de no expresar en persona todo aquello que sí hacemos vía smartphone vuelven más mecánicas las relaciones y, a la vez, rutinarias. Siempre son los mismos saludos, íconos y contestaciones, teniendo la impresión de haber robotizado las relaciones, pudiéndonos contar todo aquello que hacemos por teléfono en persona, innovando, entre lugares diferentes, sin necesidad de estar relatando absolutamente todo lo que hacemos de la forma más genérica.

¿Conocías estos 5 problemas que provoca la tecnología en las relaciones?

Estas 5 cosas de las relaciones por Whatsapp durarán más tiempo de lo que nos gustaría y, lo peor, es que sus efectos nocivos parecen aumentar cada año. No obviamos las muchas ventajas de esta y otras apps, pero sí es cierto que no podemos evitar manifestar las consecuencias que pueden llegar a ocasionar en las personas sin (y esto es lo más triste) apenas saberlo.

Pasemos la tarde en los parques, escribamos cartas, mantengamos nuestro compromiso y regalemos rosas que huelen, por favor.

¿Tú también piensas que este tipo de apps han revolucionado el mundo de las relaciones?