¿Tu hijo se niega a que le cambies el pañal? Estas pueden ser las razones

Tu niño es pequeño, pero todo indica que ya comienza a sacar su carácter, tanto que no te deja que le cambies los pañales.

Es una situación muy graciosa si se observa desde afuera y sobre todo si le ocurre a otro. Recuerdo cuando, en ocasiones, estaba apurada y tenía que salir corriendo detrás de mi hijo hasta alcanzarlo, para por fin cambiarle los pañales. Aunque no todo terminaba ahí, porque primero tenía que lograr que se quedara quieto. ¿Te suena? Te explicamos el por qué.

¿Por qué se niegan?

En su momento, el pediatra me dijo que era un tema de autonomía; es decir, a medida que los niños crecen y comienzan a caminar, se sienten más independientes y por lo mismo, se resisten a que les vistan o le cambien el pañal.

Por otra parte, también me decía que luego del primer año, de alguna forma comienzan a ponernos a prueba, a ver hasta dónde llegamos y qué poder ejercen sobre nosotros. Por eso, es importante saber poner límites desde la tranquilidad, para que no se salgan con la suya.

Trucos para el cambio de pañal

El cambio del pañal no es a lo único que se niegan, también lo hacen a la hora del baño, de vestirse o cepillarse los dientes; es decir, cualquier cosa que les impida seguir jugando o detenerse por un rato, no es de su interés. Por eso, Cathryn Tobin, MD, autor del libro de Toddler 411: Clear Answers & Smart Advice for Your Toddler, nos da un par de claves al respecto, sugiriendo…

• A la hora de cambiar el pañal, hablarle de un tema que capte su atención.
• Colocar justo al lado del niño un peluche o juguete favorito.
• Antes de ponerte en situación de convencerlo, es mejor que tengas todo lo que necesitas a tu alcance para evitar que se levante y salga corriendo desnudo.
• No pierdas la calma ni grites.
• Intenta cambiarlo justo ahí, en donde se encuentre. Por ejemplo, si está jugando en el piso, coloca una manta y túmbalo para cambiarlo.

Como de algún modo tu hijo te desafía con su actitud, una buena idea consiste en preguntarle en qué sitio quiere que le cambies el pañal. O si prefiere que lo cambies acostado o de pie. Si lo haces de esta forma, tu pequeño sentirá puede decidir, con lo cual tenderá a responder y aceptar de mejor agrado la tarea.

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