Si tienes «senos empedrados» por exceso de leche, esto es lo que NO deberías hacer

Los primeros días después del parto es normal que tener una mayor cantidad de leche, y el volumen acumulado suele ser mayor al que el bebé, quizás, es capaz de tomar. Si notas que tus senos tienen leche acumulada y las areolas están muy estiradas, es aconsejable que el excedente de leche sea retirado. Y sobre todo, evita el hábito común de usar compresas calientes.

Cómo evitar la leche empedrada

Retirar el exceso de leche de los senos no solo aliviará la incomodidad, sino que también puede facilitar la próxima sesión de amamantamiento. El consejo que comparte la Maternidad São Luiz, de San Pablo, es comprobar antes de amamantar si la areola es flexible. Si es rígida, intenta masajear la región con la punta del dedo índice.

Haz el masaje con movimientos circulares por todo el pezón y el seno, el objetivo es desobstruir el camino de la leche. Los masajes ablandan la región y facilitan el amamantamiento. Las compresas de agua caliente tienen el efecto contrario, aumentan aún más la producción de leche.

Después de amamantar, comprueba siempre que no haya puntos de obstrucción para la leche. Si es necesario, haz un nuevo masaje usando la punta de los dedos índice y medio.

Puedes aplicarte también bolsas de hielo en los senos luego de amamantar, o compresas frías hechas con un pañal de tela mojado, dejado previamente en la heladera o en el congelador. Estas compresas frías son importantes en los intervalos de amamantamiento para disminuir los dolores.

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Original Author: Camila Silva Original Author URL: https://www.vix.com/pt/users/camila-silva
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