No tienes una doble de ti, dispones de 24 horas para ser mamá, empleada, esposa, ama de casa, ser tú misma y descansar, así que... ¿cómo puedes hacerlo todo?
Qué hacer cuando te sientes abrumada de ser madre


Es normal que te sientas abrumada cuando quieres cumplir con tus responsabilidades. ¿Sientes que te falta tiempo? A todas las madres nos ocurre, ya sea que estemos en pareja o solteras.
¿Necesitas saber qué hacer para no sentirte abrumada? A continuación te explicaré lo que puedes hacer.
Respira hondo
Si lees este artículo es porque necesites aliviar tu sentimiento de agobio, ¿verdad? Empieza por cerrar los ojos y respirar hondo, inhalando aire por la nariz y exhalando por la boca.
Una respiración que llene tus pulmones de aire, te haga expandir el pecho y dejar que el aire se escape lentamente, te ayudará a serenarte y a volver a tu eje en pocos minutos.
No pienses que es perder el tiempo, lo necesitas para seguir adelante. Si tú no estás bien, las cosas no saldrán bien.
Cree en ti
Puedes estar pasando por una mala racha y por eso, puede que te sientas algo más abrumada de lo normal. Es temporal, ese sentimiento no va a durar para siempre. Estoy segura de que tienes una fuerza interior que desconoces.
El modo en como te sientes ahora es solo una parte de tu vida, tienes que aceptar y permitirte sentir lo que sientes. Los sentimientos que erróneamente consideramos de debilidad también forman parte de nosotras y ¿sabes para qué? ¡ Para hacernos más fuertes!
Si lo piensas de forma detenida, sentir agobio es el primer paso para comenzar a mejorar, es la señal que envía tu cuerpo de que así no va más.

Sin prisas pero sin pausas
Piensa en un área de tu vida en la que te sientas abrumada ahora mismo y en los pequeños cambios que puedes hacer para mejorar la situación. Podrás tener mayor control sobre la situación y superar el agobio si dedicas un momento a analizar qué es lo que está pasando en lugar de seguir como un hámster en su rueda.
Por ejemplo, si salir por la mañana hacia la escuela con los niños es todo un problema, tienes que cambiar las rutinas matutinas para aliviar el estrés y ahorrar tiempo. Trabaja solo un aspecto por vez y así harás que tu esfuerzo valga la pena.
No olvides que algo tan simple como pedir ayuda a familiares y amigos puede aliviarte. Esto no quiere decir que no te hagas cargo de tu responsabilidades como madre, sino que para cumplir con todo lo que quieres, un poco de ayuda extra no te vendrá mal.
Sí, ser mamá a veces es abrumador, pero en el fondo sabemos que no lo cambiaríamos por nada del mundo. ¡Amamos la familia que hemos formado!

