Los niños en edad preescolar están totalmente llenos de energía, su impulso vital los lleva a aprender constantemente todo lo que acontece a su alrededor. En ese proceso, preguntan, miran, tocan, se ríen con toda franqueza, corren. Algunos padres dicen de sus hijos que nunca se están quietos, ignorando que el desarrollo natural los provee de esa fuerza y dinamismo. La función nuestra como educadores es guiarlos para que su vitalidad se aproveche adecuadamente.
Juguetes más propicios para los preescolares

En este sentido, sería bueno que los orientáramos a utilizar juguetes que tengan un contenido educativo, como pueden ser los títeres, los juegos de disfraces, los de excursiones al bosque, los caballetes y materiales artísticos en general, así como los libros que apelen a la imaginación y al uso del habla rítmica.
Al ser una edad muy socializada, los preescolares prefieren siempre jugar entre ellos que solos. Por esta razón, son muy útiles los juegos de roles donde cada quien desempeñe una función social: juegos de doctores; de construcción; de granjas con animales, donde hay que realizar distintas tareas; juegos de cocina, son algunos de los más seleccionados.
En la edad preescolar, se está produciendo un desarrollo motor importante en los niños, por lo que los juegos físicos les gustan mucho y les son provechosos. Tienen un mayor control muscular, lo que se expresa en que pasan del triciclo a la bicicleta. Es este un excelente juguete en este momento de su desarrollo.
Los juegos de rompecabezas constituyen una buena manera de canalizar la coordinación manual y la agilidad mental, que ya empiezan a incrementarse. Se les pueden proveer de juegos sencillos pero creativos, como los juegos de costura, plastilina para hacer figuras variadas o pinturas con las que realizar dibujos.
Es importante señalar que a esta edad los niños aún juegan con juguetes de la etapa anterior, lo que cambia es la manera en que los manipulan. Los educadores debemos orientarlos, animarlos a ser más creativos y a que experimenten formas nuevas.
Si bien en este momento, ya hay más seguridad para que los niños jueguen sin que ocurran accidentes, siguen siendo peligrosos los objetos eléctricos o cortantes, los que deben ser evitados hasta etapas posteriores.









