Importancia de los deportes para los niños

Estoy segura de que concordarán conmigo: la vida sin ejercicios sería muy aburrida para todos. Los deportes son imprescindibles para que los seres humanos logren una plenitud en los planos físico y mental. Especialmente son vitales para el buen desarrollo de los niños y jóvenes. Ayudan en su crecimiento y los proveen de momentos de goce con sus compañeros.

Razones para estimular los deportes en nuestros hijos

Disciplina

Si no quieres que tus hijos tomen el camino de las drogas, la bebida y el cigarro, este es el momento de inculcarles valores de salud adecuados a través del deporte. Alentar que los niños participen en actividades deportivas les hace comprender el sentido integral de la vida. Por otro lado, les enseña a tener una dieta balanceada, la ejercitación el cuerpo, el descanso y las rutinas saludables del sueño. Las artes marciales en especial son los deportes más adecuados para cultivar un sentido de disciplina en los pequeños.

Trabajo en equipo

Los deportes son actividades eminentemente sociales, siempre hay que trabajar con más de una persona. Por tanto los niños establecen relaciones con el resto de sus compañeros. A la hora de crear estrategias y lograr metas, los equipos deportivos necesitan unidad y cohesión, algo que luego será muy útil cuando el menor crezca y comience a tenga un empleo. Sabrá integrarse al ambiente y tendrá habilidades para laborar en equipo.

Respeto

En el deporte se aprende a respetar las reglas, las señales, los consejos de los árbitros, de los entrenadores, así como las sugerencias de los compañeros de equipo. Los niños que practican deportes desarrollan el respeto hacia las normas y las personas que les rodean, elementos muy necesarios para la vida social.

Espíritu deportivo

En las actividades deportivas se defiende siempre la idea de que a veces ganamos y a veces perdemos, pero todo se equilibra al final. Los deportes enseñan a los niños a ser fuertes, incluso en momentos de derrota. Aprenden a ser humildes y a aceptar los fracasos y errores, algo esencial para sus vidas futuras. Por otra parte, hacer ajustes necesarios en cada intento cultiva en ellos la persistencia y la idea de no repetir los mismos errores del pasado.

Entrenamiento

Para poder ganar cualquier juego deportivo se requiere mucho entrenamiento y planificación. Por tanto, en los deportes los niños practican constantemente habilidades, repiten ejercicios una y otra vez con vistas a alcanzar el nivel deseado. El mismo principio funciona para la vida, los menores aprenden a hacer planes y entrenar intensamente para lograr sus metas.

Determinación

Los deportes mejoran la perseverancia de los niños, su determinación a alcanzar lo que se proponen. Para poder ganar, los jugadores deben valorar el esfuerzo, la dedicación y la paciencia, aspectos del carácter que se desarrollan en estas edades y son útiles en la vida a la hora de tallar éxitos.

Competitividad

Sin lugar a dudas, las actividades deportivas desarrollan las ansias de esforzarse en cada área en que el niño participa. Se fortalece la voluntad de dar lo máximo en cada encuentro, lo que permite que este aprenda a manejar situaciones de presión y a asumir las derrotas frente a un mejor jugador. Este sentido de competitividad será muy importante en los distintos espacios en que se mueva el niño cuando crezca.

Desde edades tempranas, alienta a tu pequeño a participar en los deportes de su agrado. No solo estarás fortaleciendo su organismo y dándole disfrute, sino que vas a lograr forjar una personalidad independiente, auténtica y auto-determinada, una mejor persona para nuestro mundo.

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