A medida que los niños crecen resulta más difícil encontrar lugares de la casa en donde poder ocultar los regalos navideños sin correr el riesgo de que estos sean descubiertos. Sin embargo, con un poquito de imaginación podemos encontrar algunos sitios insospechados por los pequeños en los que esconderlos.
Ideas ingeniosas para esconder los regalos de Navidad

Ático o sótano
Si tienes algunos de estos ambientes en tu casa o algún otro tipo de cuarto o trastero al que nunca entren los niños, esconde los regalos allí. De todas formas, ponte en el lugar de ellos y piensa en qué sitios de la casa buscarías tú. Si crees que de algún modo podrían entrar a estos sitios, procura envolverlos en papel periódico, bolsas negras o de forma tal que no parezcan regalos.
Utiliza las maletas
Este es también uno de mis escondites. Nunca creerán que estén allí adentro ya que asocian las maletas con el hecho de viajar. Es un buen sitio porque tienes suficiente espacio para obsequios grandes y no se aplastan, a la vez que están protegidos de posibles caídas.
Cajas camufladas
Esta es otra forma, aunque creo un poco riesgosa. Se trata de guardar los regalos de Navidad dentro de cajas que tengan etiquetas grandes y legibles que tengan escrito cosas como “carpetas de primer grado” o “papeles del colegio”, seguro que a los niños no les despierta interés nada de eso.

En un cubo de basura
Compra un cubo enorme y sitúalo en el trastero o en el garaje, esconde dentro los regalos. Debajo de la cama no es lo que crees, es un escondite muy obvio, pero resulta efectivo si colocas los regalos dentro de cajas o bolsas y a su vez las rellenas con trapos, ropa vieja, toallas y sábanas que ya no utilices.
En el cesto de la ropa sucia
Coloca los regalos en la zona inferior de la cesta y cúbrelos de sábanas o toallas viejas, para que cuando pongan la ropa sucia no los vean.
Mis escondites preferidos
Desde que mis dos hijos mayores me descubrieron haciendo de “mamá Noel”, ahora con el pequeño tengo mucho cuidado de que no me suceda lo mismo, por eso comparto contigo los sitios en donde oculto los regalos.
Dentro de la lavadora, en una bolsa. El único inconveniente es que hasta que llega el gran día, cada vez que debo usarla tengo que quitar los regalos para poder lavar. Sin embargo, si tuvieras una lavadora o secadora en desuso archivada sería otra excelente opción.
Arriba de la alacena de la cocina es otro de mis escondites. En el espacio que queda entre el techo y la parte superior de la alacena guardo los regalos. Es muy alto para que mi hijo los vea y ¡además entran varios presentes!
¿Qué estás esperando para esconder los regalos hasta que sea el momento de llevarlos al arbolito? ¡Ya mismo elige una lugar para esconderlos! Que tengas una muy feliz Navidad.









