¿Recuerdas algún hecho inusual durante tu trabajo de parto? ¡Apuesto a que sí!
Estas historias de partos son tan sorprendentes que no podrás creer que sucedieron

Todos los partos son diferentes, incluso si se trata de la misma mujer que tiene más de un hijo. En mi caso, por ejemplo, tuve tres embarazos y los tres partos fueron completamente distintos entre si, ¡pero fueron maravillosos!
En esta oportunidad quiero compartir algunas historias de partos que no vas a poder creer que existieron, pero sí, son reales.
La abuela más joven del mundo

Rifca Stanescu de Rumania se convirtió en abuela con tan solo 23 años de edad. Su hija, María, de 11 años, dio a luz a su nieta.
Cabe aclarar que Rifca tuvo a María a los 12 años, cuando se fugó de su casa por temor a ser forzada a contraer matrimonio. Sin embargo, ella obligó a su hija a casarse a muy temprana edad, lo que dio como resultado que tuviera a su hijo con tan solo 11 años.
Fue madre después de correr una maratón

Amber Miller es una deportista que adora correr maratones. Tanto es así que decidió participar en la maratón de Chicago con 39 semanas de gestación, con la anuencia del médico que la atendió durante todo el embarazo.
Ella quería correr la primera mitad de la carrera y caminar el resto con su esposo acompañándola, fue en este segundo tramo donde comenzaron las contracciones.
Solo tuvieron tiempo de comer un pequeño bocadillo y salieron hacia el hospital, donde Amber finalmente dio a luz a una niña completamente sana.
No sabía que estaba embarazada

Jennifer West estaba de vacaciones un 4 de julio y despertó con un gran dolor de estómago. El dolor se hacía cada vez más intenso y cuando no lo soportó más, pidió ser llevada a un hospital.
Para su sorpresa y la de su esposo Dan, en el hospital le dieron la noticia de que estaba en trabajo de parto. ¡Ella nunca sospechó que podía estar embarazada! Después de unas cuantas horas nació Robert Hayward West con 3,600 kg.
Lo más extraño de este caso es que Jennifer tuvo sus menstruaciones regulares y no presentó nunca ningún tipo de síntoma acorde a lo que académicamente conocemos con embarazo. No tuvo mareos ni náuseas y su barriga tampoco creció.
Dio a luz después de obtener su registro de conducir

Si bien una puede desear tener el registro, esto para mí ya es demasiado. Emily French de Escocia tuvo que esperar durante varias semanas para poder tomar el examen necesario para obtener su permiso. Justo coincidió que comenzaron las contracciones de parto. Pero ella tomó una decisión, esperó hasta pasar el examen y aprobarlo para dirigirse al hospital a dar a luz.
Estas historias sobre partos son increíbles, pero completamente reales. Sin duda cada nacimiento es único e irrepetible. Seguro que los tuyos tendrán sus anécdotas como nos pasó a todas.








