Hablando de pañales tenemos muchas opciones en el mercado. Los hay en diferentes tallas, precios, con dibujos, etc. Pero... ¿qué es lo que debe cubrir un pañal realmente efectivo?
Cómo elegir pañales para bebés

Durante al menos los 2 primeros años de vida de nuestros hijos harán uso del pañal y digo al menos porque según la opinión de algunos pediatras, hay niños que no logran controlar sus esfínteres hasta los 6 años y esto se sigue considerando normal, así que puede pasarle a cualquiera.
Por ello es necesario tomar una buena decisión para elegir pañales para bebés, ya que acompañados de la leche son uno de los gastos principales en esta primera etapa de nuestros pequeños.
¿Qué pañales comprar?
Si bien hay pañales verdaderamente económicos a diferencia de otros que cuestan hasta el triple del precio, no es el único punto que debemos considerar. Recordemos que el pañal además de absorber los desechos de un bebé, también debe ser delicado con su piel y resistente.
Esto lo aprendí con la experiencia, ya que antes de elegir la marca que ha acompañado a mi niño por 2 años, experimenté con muchos pañales que no valían la pena, así que toma nota de lo siguiente, pues te puede resultar muy útil.
Absorción
Al principio los desechos del bebé son muy líquidos. Mientras más crece estos se vuelven abundantes así que sea la etapa que sea vas a requerir un pañal que absorba a la perfección con esto evitarás accidentes y escurrimientos, y mientras más rápido absorba la orina, menos irritación habrá en su piel. Además del material absorbente, revisa que los elásticos de las piernas también funcionen.
Material
Muchos pañales prometen ser suaves y delicados, pero esto sólo lo podrás comprobar tú misma al revisarlos, ya que aún cuando se dicen ser de algodón, sólo encuentras una pequeña parte y el resto de plástico, algo que irritará la piel del bebé y puede producir, incluso, hongos por la humedad causada.
Anatómico
Un pañal debe ajustarse al cuerpo y necesidades del bebé, además de ser suave y absorbente. Necesitas que tenga diseño anatómico y se ajuste tanto al cuerpo del bebé sin lastimarlo, que no lo apriete o quede demasiado suelto, así como adaptarse al movimiento para cuando comiencen a caminar o gatear no pierda su eficacia.
Valorando estos puntos básicos podrás comparar marcas y costos y quizá un paquete de pañales que antes considerabas costoso tenga más beneficios que lo ameriten, ¿qué opinas?









