Caída de los dientes de leche

A partir de los 5 años aproximadamente nuestros hijos comenzarán a perder sus dientes de leche, esto sucede porque abajo en la encía ya están presionando los dientes permanentes para salir y esa presión que ejercen aflojan los dientes de leche y terminan cayéndose. Siempre creemos que el diente permanente nace en el mismo lugar donde estaba el diente de leche, pero esto no es así, nace a un costado y al caer el diente de leche se desplaza ocupando el espacio vacío.

Los dientes de leche suelen ser pequeños teniendo entre diente y diente una separación, la cual desaparece al nacer los dientes permanentes que son de mayor porte. Estos al nacer a veces lo hacer torcidos, pero probablemente al completarse la dentadura logren alinearse; si no lo hacen por si solos debemos recurrir al dentista para que realice un tratamiento con ortodoncia.

Para nuestros hijos este es un momento hermoso y lleno de magia, ya que por la pérdida de cada diente recibirán la visita del ratón Pérez. El ratón Pérez les cambia a los niños cada diente por dinero. Los niños al acostarse dejan debajo de la almohada el diente que se les ha caído y al despertarse por la mañana ya no estará el diente, en su lugar encontrarán el dinero que ha dejado el ratón Pérez.

La caída de los dientes de leche no son lo importante en sí, a lo que debemos prestar atención los padres es al modo en que crecen los dientes definitivos, es también prioridad que en estos momentos nuestro niño visite al dentista, que este tenga un control sobre el crecimiento de estos dientes y les enseñe desde el comienzo la mejor forma de cuidarlos.