Aceptar que no existe 'la madre perfecta' y otras formas de superar la depresión posparto

La depresión posparto es un trastorno del estado de ánimo en las mujeres que acaban de dar a luz. Es un momento difícil y delicado. Los síntomas pueden incluir insomnio, pérdida del apetito, irritabilidad intensa o dificultad para vincularse con el bebé. Pero no te asustes, este padecimiento se puede prevenir y superar. Estos consejos te ayudarán.

#1 Olvídate de las expectativas

Es cierto que el cine y la televisión retratan la maternidad y el posparto como algo lleno de magia y alegría. Aunque estos elementos sí están presentes, no todo es miel sobre hojuelas.

Al final, estás criando y cuidado de un nuevo ser humano. No te presiones por la perfección, ni dejes que el estrés se apodere de ti. Lleva tu propio ritmo.

Nadie recibe instrucciones de cómo ser mamá y puede que tu proceso sea muy diferente al de tus amigas o familiares. Sólo sigue tu instinto y consulta al médico cuando sea necesario. Tienes derecho a que las cosas no salgan como esperabas.

#2 No dejes pasar más tiempo

Como ya leíste al inicio del texto, la depresión posparto se manifiesta a través de varios síntomas: insomnio, pérdida del apetito, irritabilidad intensa o dificultad para acercarse al bebé.

Si experimentas uno o varios de estos síntomas, es indispensable que consultes al médico. Él podrá descartar una depresión posparto, o bien confirmarla.

Anticiparte puede hacer la diferencia en el padecimiento. Además, te ayudará a sentirte mejor en menos tiempo. No tengas miedo a pedir ayuda y consejo de un especialista.

#3 Exprésate

Uno de los errores más comunes en las nuevas mamás, es concentrarse sólo en el bebé y dejar de pensar en ellas mismas. Es importante no descuidar tu salud y bienestar.

Algo que puede ser muy útil es expresarte y decir lo que sientes a tus amigos y familiares. No temas ser juzgada, ellos te ayudarán y superarás esta difícil etapa.

#4 Deshazte de malos pensamientos

La depresión posparto también puede hacerte pensar que eres una mala madre. Recuerda que no eres una superheroína, estás dando tu máximo esfuerzo y es normal cometer errores en el camino.

Quizá en un principio te sea difícil atender a tu bebé, pero poco a poco se irán conociendo y aprenderás a identificar sus necesidades. Estás haciendo un excelente trabajo, no dejes que nada ni nadie te haga pensar lo contrario.

#5 No hagas nada con lo que te sientas incómoda

La llegada del bebé no sólo es emocionante para los padres, también para los amigos y familiares. Así que es probable que muchos quieran visitarlos para conocer al nuevo miembro.

Sin embargo, tú como mamá estás más alerta que nadie y la situación puede generarte estrés y ansiedad. Tal vez piensas que alguien puede causarle algún daño a tu pequeño.

Esta es una respuesta normal en muchas madres. Si no te sientes en condiciones de recibir visitas, dilo con confianza. Los demás deben respetar tu tiempo y espacio. Puedes posponerlo hasta que te sientas más tranquila.

Tampoco dudes en expresar tu descontento cuando las personas ya estén ahí. Si no quieres que alguien más sostenga al bebé, dilo. También puedes pedirles que se aseen correctamente o alguna otra condición, cualquier petición es válida cuando se trata de tu bebé.

#6 No quieras hacer todo

Muchas mamás quieren cuidar del bebé y de los otros hijos, cocinar y limpiar la casa... ¡todo a la vez! Pero no siempre es posible, en especial con un nuevo bebé en casa.

Deja que los otros miembros del hogar se encarguen de diferentes tareas. Querer hacer todas las actividades sólo te generará estrés y será muy difícil lograrlo.

#7 Dedícate un día

La maternidad puede llegar a ser abrumadora, lo sabemos. No es nada fácil ser responsable de otra persona. Por lo tanto, mereces olvidarte del mundo de vez en cuando y concentrarte en ti.

Deja a tu bebé con su papá o una persona de confianza y olvídate de todo. Puedes ir al cine, consentirte con una comida o ir a relajarte a un spa. Lo importante es encontrarte contigo misma. Recuerda que dedicar un tiempo para ti no te hace una mala madre.

#8 No te aísles

Convertirte en mamá no quiere decir que debes dejar tu vida de lado. Es muy importante que sigas tu rutina de vida y no olvides hacer lo que te gusta.

Sigue en contacto con tus amigos y personas que quieres. Puedes seguir haciendo lo que te gusta e invertir tu dinero en ti. No te sientas culpable por seguir con tu vida.

#9 Descansa

Ser mamá a tiempo completo te dejará exhausta, por lo que debes descansar como es debido para que tu salud esté óptima, al igual que tu estado de ánimo.

Sabemos que puede ser difícil con un bebé en casa, pero debes dormir cuanto sea posible. Descansar también es despejar tu mente por un tiempo y relajarte.

#10 Acepta ayuda

Todos necesitamos ayuda en diversos momentos ¡y una mamá más! Como ya dijimos es algo agotador, pero tener el apoyo de los demás puede hacerlo mucho más sencillo.

Acepta las ofertas para cuidar al bebé o que alguien cocine para ti y tu familia. No tengas miedo a mostrarte vulnerable, es sólo un poco de ayuda.

También puedes aceptar los regalos que te hagan a ti y a tu bebé. Así podrás tener todo lo necesario y podrás ahorrarte tiempo y dinero. Cualquier oferta es buena.

#11 Habla con otras mamás

Nadie mejor para narrarte su experiencia que otra mamá. Aunque parezca lo contrario, son muchas las mujeres que sufren depresión posparto .

Conocer otras vivencias puede ayudarte más de lo que piensas. Otras madres pueden darte consejos y apoyarte para superar los momentos difíciles.

#12 No permitas que te hagan sentir mal

Muchas personas se sienten con el derecho de criticar tu aspecto físico después de dar a luz. Esto puede afectar severamente tu autoestima y tu ánimo.

No dejes que nadie te haga sentir mal al respecto. El embarazo y el parto son procesos complicados para el cuerpo, sobre todo porque implican muchos cambios por dentro y por fuera. Es muy probable que luzcas cansada (entre otras cosas), pero eso no te hace menos bella.

Quiénes se sienten con el derecho de hacer estos comentarios, sólo buscan causar un efecto negativo en ti. Aléjalos de tu vida e ignora cualquiera de sus críticas.

#13 Busca grupos de apoyo

La depresión posparto es más común de lo que piensas. Es un problema que aqueja a muchas mujeres, pero eso quiere decir que también hay bastantes madres que lo han superado.

Nadie podrá entenderte mejor que alguien que ya pasó por eso. Afortunadamente, el Internet y las redes sociales nos acercan a otras personas, por lo que puedes usar esto a tu favor.

No dudes en establecer un contacto con otras mamás que hayan sufrido depresión posparto. Apóyate en ellas y pide ayuda cuando sea necesario.

#14 Acércate a tu bebé

Puede ser difícil, pero estar cerca de tu bebé y tus otros hijos puede darte la fortaleza para enfrentarte a este padecimiento. Tu familia será tu máxima motivación.

Además, estrechar lazos con tu bebé les hará tener una conexión más fuerte, por lo que el estrés y la ansiedad irán desapareciendo poco a poco. Sin embargo, no debes descartar la ayuda del médico o cualquier otro profesional de la salud que te oriente para que la maternidad sea más llevadera.

#15 Acércate a tu pareja

Si tienes a tu pareja a tu lado, puedes pedir su apoyo. Será un gran soporte para ti. No olvides que él o ella también debe ser partícipe de la crianza del nuevo bebé.

Y claro, un poco de amor y apapacho no están de más. No temas tener intimidad con tu pareja, los acercará mucho más en ese momento y te hará sentir mejor.

Tengan citas juntos y planeen a futuro. Los pequeños detalles también importan mucho. Entrégale tu confianza y cuéntale cómo te sientes, su comprensión es invaluable.

#16 No recibas consejos que no pediste

No faltarán las personas que quieran instruirte o incluso regañarte sobre cómo ser mamá. Y aunque pueden hacerlo con una buena intención, afecta bastante.

Este tipo de comentarios pueden hacerte sentir insegura con tus decisiones. Incluso te pueden hacer pensar que estás haciendo las cosas mal. ¡Pero no es así!

Sólo tú conoces lo que es mejor para ti y tu pequeño. Las dudas que tengas puedes consultarlas directamente con el médico, pero no permitas que te hagan sentir una mala madre, porque no lo eres.

Los consejos pueden ser bien recibidos, pero sólo cuando fueron pedidos. De lo contrario, se convierten en comentarios dañinos o tóxicos que no te harán nada bien.

#17 Desahógate

Estamos seguros de que eres una mujer muy fuerte y capaz. Pero acabas de vivir una situación complicada, así que permítete experimentar cualquier emoción.

No te limites en tus sentimientos, esto no te traerá ningún beneficio. Lo mejor que puedes hacer es desahogarte, ya sea sola o en compañía de alguien más.

Si necesitas llorar, házlo. No pasa nada. Podrás liberarte del estrés y la ansiedad. El llanto es una gran manera de deshacerte de lo negativo. Además, llorar no te hace más débil.

#18 Practica alguna actividad física

Tal vez, ejercitarte sea en lo que menos piensas en ese momento, pero te ayudará más de lo que imaginas. El ejercicio es una excelente manera de combatir la depresión.

Ponerte en movimiento hará que tu cuerpo libere endorfinas, las cuales mejoran tu estado de ánimo. Esto te motivará a seguir adelante y te dará la fuerza que necesitas.

#19 Ve a terapia

Desafortunadamente, la terapia psicológica es todavía un tabú. Se piensa que sólo debemos recurrir a un terapeuta cuando tenemos algún problema mental o cuando la situación es extrema, pero no es así.

Los psicólogos y terapeutas son expertos en la mente humana. Te ayudarán a analizar tus problemas desde otro punto de vista y así solucionarlos por ti mismo.

Es muy importante que encuentres un especialista que te genere confianza, así todo será más fácil. Incluso, hay profesionales que son expertos en la depresión posparto.

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