Lifestyle

A los dos años los ñiños experimentan rompiendo

A los dos años aproximadamente es común que los niños quieran investigar y descubrir cosas nuevas, y para eso comienzan a romper cada cosa que pasa  por sus manos. Arrancan las páginas de los cuentos, mutilan a la muñeca o al osito, desarman cada cosa que llega a sus manos.

PUBLICIDAD

No debemos preocuparnos porque esto es señal de que nuestro hijo ha dado un paso muy importante en su desarrollo mental, descubriendo que las cosas esconden algo adentro o que pueden cambiar de forma. Luego de la primera experiencia no hay quien los frene, saben arreglárselas para abrir las tapas de las cajas, aprietan, giran, presionan, tiran… y sin saber cómo siempre llegan a todos lados.

Al ver los destrozos no todos los padres son capaces de asumir que esta fase del aprendizaje es necesaria y que su hijo tendrá que pasar por ello. Los padres debemos tener en cuenta que cada experimento que ellos hagan les enseña algo nuevo.

En esta etapa a los niños les resulta muy difícil aceptar que hay cosas que no tienen arreglo, o sea que lo que ellos han dañado es irreversible. Creen que sus padres son omnipotentes y que todo lo pueden arreglar. Hay que quitar de su alcance todos los objetos de valor y colocarlos lo más alto posible.

Los padres debemos entender que aquello que rompen no podemos sustituirlo enseguida. Si el niño rompe un juguete y lo reemplazamos automáticamente, le costará más darse cuenta de las consecuencias de su conducta. Y si rompe algo que no es de él debemos hacerle entender que eso no está bien. Esta etapa pasará y a los 3 o 4 años no sentirán la necesidad de desarmar todo para entender el porqué de las cosas. Podrán relacionar causa y efecto sin tener que experimentarlo.