Lifestyle

7 sorpresas que pueden darse en nuestro cuerpo en el posparto

El embarazo y el parto son procesos a los que se les presta mucha atención, tanto por parte de la madre y su pareja como de su entorno. Y debemos celebrar que así sea, porque son momentos de cambios y transformaciones radicales en la vida de una mujer.

PUBLICIDAD

Ahora, casi nadie se atreve a hablar sobre «el después». ¿Qué nos sucede una vez que tenemos nuestro bebé en brazos? Si bien sabemos que nos encontraremos con un cuerpo diferente del que estábamos acostumbradas (¡adiós, panza!) no todas estamos al tanto de las sorpresas que pueden darse en nuestro cuerpo en el posparto. Hoy te contamos sobre 7 sorpresas que pueden darse luego de dar a luz. Encuéntralas a continuación.

1. La forma del cuerpo

Imagen iStock

Está claro que ninguna espera tener el cuerpo que tenía antes del embarazo en la primera semana del posparto. En este caso, la genética y las características particulares de la mujer juegan un rol importante. Algunas pierden peso en partes que nunca pensaron perderlo y otras se encuentran con kilos de más en zonas en que preferirían no verlos. En cuanto al peso corporal, la lactancia influye en gran medida, ya que está comprobado que ayuda a equilibrar el peso de la reciente madre (entre tantos otros beneficios).

2. Vientre flácido

Durante las primeras semanas el vientre suele quedar flácido y un tanto «colgante». Esto se debe al estiramiento enorme que ha hecho la piel de la zona para poder permitir el crecimiento del bebé. No te preocupes, con el paso del tiempo y con algunos ejercicios posparto la situación mejora y verás que de a poco la piel vuelve a donde estaba antes.

3. Grasa en la espalda

Muchas mamás acumulan grasa en la zona de la espalda durante el embarazo. Una vez que el bebé sale al mundo, estas adiposidades suelen quedarse un tiempo con nosotras. Es más, ¡algunas prendas las resaltan! En este caso, el ejercicio posparto también ayuda muchísimo a tonificar y fortalecer la espalda.

PUBLICIDAD

4. Pechos caídos

Imagen shutterstock

Los pechos suelen disminuir su tamaño y dejarse llevar por la gravedad, sobre todo una vez finalizada la lactancia. Ya sea que des de mamar 1 año o 3, es probable que luego veas cambios en el aspecto de tus senos. Es totalmente normal e indica que has tenido el privilegio de darle alimento a tu hijo con tu propio cuerpo.

4. Estrías

Las estrías son marcas que se producen en la piel debido al estiramiento que se da durante el embarazo. En ocasiones, pueden continuar siendo visibles luego del parto. Tanto su aparición como su desaparición tienen que ver con el tipo de piel de la mujer y con qué tan hidratada se encuentre. Beber suficiente agua será clave para poder disminuir las probabilidades de que surjan.

5. Celulitis

Imagen iStock

Tanto los muslos como la zona del costado del abdomen suelen ser zonas del cuerpo en las que aparece la temida celulitis. La ganancia y luego la pérdida de peso es una de las principales razones por las cuales puedes observarla en tu cuerpo.

Si bien existen algunas cremas que puedes aplicar, lo mejor es mantenernos activas y realizar ejercicios acordes al momento en el que nos encontremos.

6. Várices

Esta es otra de las sorpresas que pueden darse en el posparto, sobre todo en las piernas y en los pies. Los cambios hormonales, la presión abdominal y la predisposición genética son algunos de los factores que aumentan las probabilidades de que aparezcan.

7. Menos trasero

Aunque no suele hablarse con frecuencia sobre esto, muchas madres recientes se encuentran con esta sorpresa.

PUBLICIDAD

El posparto es una fase en la vida de las madres de la que debería hablarse con más frecuencia. En el cuerpo femenino pueden darse estos y otros cambios.

Simplemente vale la pena recalcar que estas transformaciones son consecuencia de traer un bebé al mundo. Este proceso fantástico sin dudas dejará marcas en nuestro cuerpo, pero a su vez estas serán el recuerdo de que pusimos todo nuestro ser para posibilitar la llegada de las personitas que más amaremos en el mundo: nuestros hijos.