La musicoterapia se hizo muy conocida en la búsqueda de mejorar la calidad de vida de los pacientes a través del sonido, el ritmo, la melodía y la armonía. De hecho, más de un estudio ha comprobado que la música promueve la comunicación, el movimiento y el lenguaje de quienes padecen diversas enfermedades.
Una enfermera le canta una última canción a su paciente y nos emociona a todos

En esta línea, encontramos el descubrimiento que hizo un grupo de neurocientíficos del Instituto Max Planck, de Alemania. Ellos comprobaron que la memoria musical y la capacidad de sentir emociones perduran hasta el final en las personas con alzhéimer.
Hay muchos trabajadores de la salud que conocen el poder de la música sobre las emociones y por eso la utilizan como una herramienta más, como lo hizo la enfermera Olivia Neufelder.
El poder de la música y el amor
Olivia Neufelder trabaja como enfermera en Vanderbilt University Medical Center, en Nashville, Tennessee y en los últimos días se hizo conocida como la enfermera «ángel». Olivia cuidaba a Margaret Smith, una mujer de 63 años con cáncer terminal. La hija de la paciente publicó un video en las redes sociales en el que se ve a Olivia cantándole a su madre «Dancing in the Sky», su canción favorita. El video fue visto por más de 3 millones de personas.
«Nunca te alejaste de su lado por elección. Las palabras no pueden describir la apreciación y el amor que sentimos por la enfermera Olivia a quien mamá llama su ángel. [...] La dedicación a sus pacientes va más allá de lo que he visto, realmente es un rayo de luz y no puedo agradecerle lo suficiente por la compasión, el cuidado y el amor que compartió con mi madre», dijo Megan, la hija de Margaret Smith.
Olivia dijo que se sentía emocionada por la gran respuesta positiva que tuvo el video y que estaba contenta de haber tenido la oportunidad de brindar consuelo a su paciente en sus últimos días de vida. Además, agregó que fue una experiencia que la desafío de muchas maneras. Según cuenta la familia de Margaret, siempre que ella le pedía una canción, Olivia se la cantaba.
Recordar nuestra canción preferida hace que revivamos emociones positivas de nuestra vida. Por eso la música logra mejorar el estado anímico. Y Olivia no desaprovechó la oportunidad de regalarle a Margaret las sensaciones más lindas antes de su muerte: le cantó su canción preferida y, en cada nota, todo su cariño.
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