Tips para tener los pies relajados

Nuestros pies soportan el peso del cuerpo y nos llevan a donde queremos, normalmente en condiciones que no son ideales, puesto que se tiene la costumbre de utilizar zapatos incómodos o poco anatómicos, que provocan mayor sufrimiento. Es importante prestar atención con el fin de mantener una buena salud: veamos cómo tener unos pies relajados fácilmente, para que puedan recorrer todos los kilómetros que se desean sin ningún problema. 

El calzado

En primer lugar, hay que darse cuenta de la importancia del calzado que se utiliza. Los pies necesitan un calzado cómodo que ofrezcan un correcto mantenimiento y que sea anatómico. De esta forma, no solo se garantiza el confort, sino también se evita el cansancio, los dolores y posibles daños causados por malos zapatos.

Higiene adecuada

Es necesario aportar a los pies los cuidados esenciales para que estén en buena salud: secarlos bien después del baño, utilizar  cremas hidratantes para prevenir la sequedad, los callos y durezas, realizar una exfoliación una vez a la semana para evitar la acumulación de pieles muertas.

Baños de inmersión

Otro  consejo para tener los pies relajados consiste en llegar a casa tras una larga jornada, meter los pies en agua templada o caliente –sin olvidarse de comprobar la temperatura–. Una vez que los pies están en el agua, se vierte una cucharada de sal. Este mineral ayuda a reducir la hinchazón y relajar el cansancio. Los pies se dejan metidos en agua 20 minutos.

Estirar

Estirar los músculos siempre es útil para reducir el cansancio y las posibles contracturas que han podido formarse tras la práctica de un deporte: carrera, bicicleta, footing. Para estirar los pies, se puede coger una pelota de tenis, de golf, o cualquier bola pequeña y, sin aplicar presión fuerte, apoyarla por encima de la planta del pie, realizando movimientos de delante hacia atrás y también por los lados. Esta técnica ayuda a masajear los pies y estirar los músculos al mismo tiempo.

Truco final

Además, tras una larga jornada de caminata, y si se está muy cansado para aplicar una de estas recomendaciones anteriores, te puedes acostar apoyando las piernas contra una pared y mantener esta posición con las piernas levantadas durante al menos 20 minutos. Esta posición estimula la circulación y relaja el cansancio.

Estos son los cuidados esenciales para tener los pies relajados. Como verás, son trucos simples que mejorarán muchísimo tu calidad de vida. ¿A qué estás esperando para ponerlos en práctica?

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