La historia de Ollie nos deja una gran enseñanza...
Se mudaron y lo abandonaron junto a la basura, pero él no dudó en volver a dar su amor a otra familia
Por:Univision
No puedo entender como existen personas capaces de abandonar a sus mascotas, en la calle, a la deriva del clima y sin comida. Nunca voy a entenderlo porque las mascotas solo saben dar amor. Ver que existen humanos que las abandonan luego de todo lo que ellas han hecho por la familia, es muy triste.
De todas formas, no todo es tan malo como parece, todavía existen personas que marcan la diferencia y nos hacen creer que la humanidad no se ha perdido…
La historia de Ollie es una de esas historia que te estremece el corazón, su familia se mudó y decidió que él no podía ir con ellos. Cuando la familia dejó en la calle la basura también dejaron a Ollie, y lo dejaron como si fuera un objeto desechable a la deriva.
Sin embargo, la lealtad de este perro fue más fuerte que el acto repudiable de su familia, Ollie esperó a sus dueños por días junto a la basura. Quienes los abandonaron volvieron pero en lugar de llevárselo, fueron a buscar a su pequeño compañero -otro perro- que también habían abandonado durante la mudanza.
Yo me pregunto: ¿qué tiene Ollie para que su familia no lo quiera llevar a su casa? ¿Qué es lo que no lo hace digno de tener una familia? No es Ollie quien tiene algo mal, su “familia” es quien no lo merece, no merece su amor y mucho menos su lealtad. Este animal fue una víctima de lo peor del ser humano.
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Un final feliz
Cuando Ollie estaba destinado a morir de hambre y de frío, los vecinos alertaron a una voluntaria de un refugio de animales, quien no dudó en ayudar a Ollie y brindarle todo lo que necesitaba para recuperarse. Además de ella, muchas personas más se sensibilizaron con la historia de este perro y decidieron donar dinero para cubrir todos sus gastos y comprarle comida.
Cuando rescataron a Ollie tuvieron que llevarlo al veterinario porque una de sus patas estaba quebrada, y luego lo llevaron al refugio animal Welfare en Detroit, donde espera por una nueva familia que lo sepa querer.
El final de esta historia es hermoso, la respuesta de la gente fue inmediata y nadie dudó en brindarle apoyo a este hermoso animal.
Ollie también hizo su parte, apenas lo rescataron comenzó a repartir amor a todas las personas que estaban junto a el, demostrando así que los animales son capaces de dar amor sin esperar nada a cambio y que son criaturas que no guardan rencor, simplemente dan su alegría a los demás sin importar lo que les haya pasado.
Deberíamos aprender de Ollie y otras mascotas como él, porque a pesar de que nos creemos la raza superior, hay muchas cosas que aún no hemos aprendido, y amar es una de ellas…
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