Estas son las razones por las que no deberías temer desagradar a otros

¿Quién no quiere sentirse considerado y apreciado? Todos. Es muy raro escuchar a alguien decir que no le interesa desagradar a algunos. Y si bien suena raro que alguien lo diga, creo que no estaría mal escucharlo seguido.

Con esto no me refiero a que tengamos que ir por el mundo desagradando, pero tampoco intentando agradar a todos. Siempre pensé el trabajo que lleva intentar agradar todo el tiempo, imagínate, tener que estar pensando dos o tres veces lo que dices, ponerle un filtro a tus pensamientos, tener que hacer cumplidos, ¿al precio de qué? ¿de caer bien?

¡Basta de tantas presiones! Cuando te muestras como eres habrá personas que sentirán agrado de tus acciones y otras desagrado. Y eso no está mal porque no todos tenemos la misma perspectiva sobre determinados temas.

Cuando te sientes cómodo con la idea de que no tienes por qué agradarle a todos, tu vida cambia por completo.

Te permite ser sincero contigo mismo

El mayor daño que te puedes hacer a ti mismo es cambiar como eres para agradar al resto. Y haciendo esto probablemente te sientas vacío. Cuando demuestras quién eres estás siendo sincero contigo mismo.

Te da el poder de decir “No”

Cuando no quieres correr el riesgo de desagradar a alguien eres capaz de aceptar algo cuando en verdad querías decir “no”. Tus “sí” y tus “no” traen consecuencias, así que no olvides que no tiene nada de malo una negación.

Te sientes más cómodo explorando tus sentimientos

 Ser auténtico te permitirá explorar tus sentimientos sin temerles, cuando ves que está el miedo, aprende a convivir con él, no te horrorices ante su llegada. Aprender a lidiar con tus sentimientos y no sentirte incómodo con ellos te ayudará a sentirte bien contigo mismo.

Tu sinceridad puede ayudar a otras personas

Quizás con tu nueva forma de relacionarte estés inspirando a otros y te tomen de ejemplo. De hecho, quitarme el peso de tener que agradar lo aprendí hace muchos años de una persona que hasta el día de hoy lo tomo como ejemplo.

Te sientes libre de expresar tus pensamientos

Una de las cosas más importantes que puedes hacer por alguien es escucharlo sin juzgarlo. Y tampoco tengas miedo de expresar lo que piensas, quítale temor a las palabras.

Te prepara para el éxito más grande

Cuanto más alto llegas, más atención recibirás y más opiniones habrán sobre ti, positivas y negativas. No temerle al desagrado te ayudará a saber lidiar con todas las opiniones.

Forzar algo que no eres aunque sea por unos minutos resulta agotador. Haz el intento de empezar por no hacer cumplidos, haz las cosas porque las sientes, no porque piensas que el otro  podría molestarse si no las haces. Tú puedes elegir cómo quieres vivir, opta por una vida llena de libertades y sonrisas.

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