Desde hace algunos años se viene hablando de los beneficios de los ácidos grasos omega en el aceite de pescado, principalmente del omega 3, que ayudan a reforzar el sistema inmune, a mejorar el cabello, la piel y las funciones cardiovasculares.
Consumir omega 3 para el embarazo, una alternativa nutritiva.

Generalmente no consumimos todo el pescado que deberíamos a la semana, por lo que tomar un suplemento que lo contenga es necesario en algunas oportunidades, como la convalecencia, pero sobretodo en el embarazo.
En pescado, por diversos motivos, como el miedo a una intoxicación alimentaria, o porque es muy liviano como comida.
Las encuestas sobre consumo de alimentos muestran que el 85% de las mujeres carecen de la dosis necesaria de omega 3. Sólo el 2% de las mujeres embarazadas tenían una dieta adecuada que cumpliera con su cuerpo y las necesidades del bebé.
El consumo de suplementos de aceite de pescado con omega 3 también ayuda a prevenir enfermedades como la depresión post-parto y la pre-eclampsia, siendo bueno tanto para la madre como para el bebé.
La dosis recomendada para una mujer embarazada es de un mínimo de 900 mg diarios, lo que equivale a comer una onza (30 gramos) de salmón. Este consumo traerá muchos beneficios, de una manera económica y más fácil que buscar los pescados y prepararlos.
Consulta con tu médico al respecto y verás que hay muchas alternativas para asegurarte una buena nutrición en el embarazo.








