Es normal que los gatos vomiten de vez en cuando, no obstante, si el vómito se convierte en algo constante es síntoma de algo más grave y es necesario atenderlos.
¡Auxilio! Mi gato está vomitando, ¿qué hago?
Por:Vanessa Mena
Lo primero que debemos saber es la diferencia entre el vómito y una regurgitación. Esta última es un rechazo pasivo a la comida no digerida e incluso a la saliva, en este caso no se presentan contracciones en el abdomen. En cuanto al vómito, se trata de un acto reflejo del organismo para eliminar el contenido del estómago, para lo cual son necesarias las contracciones abdominales.
A veces nuestro amigo felino come con mucha prisa y su estómago no puede digerir bien el alimento, tras lo cual viene una regurgitación que no representa mayor peligro. Sin embargo, su naturaleza independiente provoca que su estómago sea susceptible a contraer enfermedades, ya que pueden consumir cosas que los dañen, sobre todo si salen de casa.
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Para saber cómo actuar, es importante tratar de conocer la causa del vómito. Platicamos con el Doctor Arturo Estrada, médico veterinario zootecnista por la UNAM, y nos explicó cuáles son las causas más comunes y qué hacer si tu gato vomita. Recuerda conservar la calma y acudir a una revisión con un profesional:
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#1 Aléjalo
Lo primero que debes hacer si tu gato vomita es revisar que el contenido digestivo no haya pasado hacia las vías respiratorias. Limpia su boca y aléjalo del material digestivo expulsado, para que no trate de comerlo de nuevo.
#2 Dieta de vigilancia
Si se trata de un gato adulto, sin enfermedades o algún otro síntoma, puedes ponerlo a dieta de 12 a 24 horas para permitir que su estómago se libere de aquello que lo está enfermando. Retírale la comida y dale agua en pequeñas cantidades durante las primeras horas. Después podrás darle una dieta blanda y observar si el vómito se detiene. Si continúa vomitando, llévalo con el veterinario.
#3 Come muy rápido
Cuando un gato come muy rápido puede tener regurgitación (trozos de comida sin digerir, sólo masticados) o vómito (alimento a medio digerir). Para que esto no ocurra puedes racionarle la comida y darle pequeñas porciones pero más frecuente. Vigila que se acostumbre a comer despacio y a masticar bien.
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#4 Bolas de pelo
Cuando el felino se acicala ingiere una gran cantidad de su propio pelo, el cual forma una bola de pelo en su estómago que después expulsa con el vómito. Para evitar que eso ocurra frecuentemente, cepilla a tu gato con regularidad. También puedes pedirle al veterinario que le dé algún medicamento o remedio natural (como la valeriana) para purgarse de vez en cuando y evitar que ese pelo se le acumule en el estómago.
#5 Estrés
Aunque no lo creas, los gatos pueden vomitar por el estrés. Estos animales son muy susceptibles a los cambios en su entorno. Si hay un nuevo miembro en la familia, te mudaste de casa o hiciste alguna remodelación, es probable que tu mascota se sienta estresada y eso provoque el vómito. Procura mimarlo un poco más para que se sienta seguro y se relaje.
En caso de que el estrés continúe, acude con tu veterinario para hablar sobre la posibilidad de recetarle feromonas o algún otro medicamento para que esté más tranquilo.
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#6 Intolerancia a algún alimento
¿Cambiaste su alimentación recientemente? ¿Acostumbras darle "probaditas" de tu comida? Si no presenta algún otro síntoma como falta de apetito o cansancio extremo, es posible que alguno de esos alimentos le esté provocando el vómito. Para saberlo debes ponerlo en ayunas de 12 a 24 horas y darle una probada de los alimentos poco a poco. Después de darle cada alimento vigílalo por un par de horas para saber si presenta o no el vómito.
#7 Intoxicación
Existen algunas plantas que resultan tóxicas para los gatos, como la azalea, el eucalipto, el lirio y el muérdago. Revisa si tu minino no estuvo en contacto con alguna de estas plantas o la ingirió. De ser así, acude con el médico veterinario para que le preescriba algún medicamento.
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#8 Otros síntomas
Si el vómito se acompaña de otros síntomas como pérdida de apetito, fiebre, diarrea sanguinolenta y/o constipación, puede ser un indicador de padecimientos más serios como parásitos, diabetes, entre otros. En este caso acude de inmediato con el veterinario para una valoración.