Abraza el optimismo con estos 4 sencillos pero valiosos hábitos que te cambiarán la vida

Hay veces que, sin darnos cuenta, caemos en una espiral de negatividad. Nada nos parece agradable, nos rodeamos de personas negativas, las actitudes de los demás nos molestan y casi que no vemos el sentido de seguir adelante.

Mal humor, nerviosismo, ansiedad y estrés son solo algunas de las consecuencias que podemos sufrir, abrumados por ese tipo de pensamientos.

Por fortuna, existen ciertos modos de entrenar el cerebro para que (gracias a un esfuerzo consciente) logremos salir de esa espiral para conectarnos nuevamente con la belleza de la vida.

Hoy te contamos 4 tips para lograrlo:

1. Escribe en papel esos pensamientos

Si escondemos e intentamos tapar nuestras emociones no solo no las resolveremos, sino que se potenciarán. Y no queremos tener exactamente más ira o más angustia. Pasa entonces esos sentimientos y pensamientos negativos que surgen al papel.

Este proceso te ayudará a verlos y a percibir su verdadera dimensión. En consecuencia, serás capaz de relativizar aquellos hechos que parecían tan graves (incluso de verlos con humor) y de pensar soluciones para aquellos que realmente precisan más reflexión.

Eres realmente capaz de brindarte buenos consejos si le buscas el lado positivo a las situaciones. Y si no logras verlo aún, ¡busca ayuda! De seguro habrá alguien de confianza con quien compartir tus pensamientos para lograr así ver la luz en el camino.

2. Cuidado con las redes sociales

Un feed plagado de comentarios, fotos y noticias negativas no es exactamente el terreno propicio para cultivar un pensamiento positivo. Si tienes que dejar de seguir algún sitio, hazlo.

Por otro lado, si tienes que dejar de ser «amigo» de alguien, que no te dé pudor hacerlo.

Una vez que hayas oxigenado tus cuentas sí puedes empezar a seguir páginas o personas que impriman positividad y entusiasmo a tus días. La inspiración será una factor fundamental para poder modificar los pensamientos que no precisas y transformarlos a tu favor.

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3. Realiza 3 grandes actos al día

«Grande» no significa costoso ni superelaborado, sino un gesto desde el amor y la alegría hacia ti, otra persona y el mundo. El primero siempre será hacia ti mismo. Recuérdate lo hermoso que eres con un post-it en la PC, repite alguna frase que te recuerde cuánto te amas o regálate una clase de yoga que te relaje y te llene de energía.

El segundo será hacia otra persona. Puede ser guiar a alguien con un consejo, decir palabras bonitas o regalar una flor. El último que sea para el mundo: recicla alguna botella, inicia un compost o dona la ropa que ya no usas.

Existen múltiples opciones. Piensa en las que estén al alcance de tu mano ¡y ponte en acción! Verás enseguida lo bien que te sientes.

4. Arma un playlist positivo

Si te sientes decaído, aburrido, de mal humor y sin ganas de nada, ¡confía en la música! Ten preparado un playlist con música positiva, energizante y estimulante que te ayude a conectar cuerpo y mente con la alegría de estar vivo. Baila, canta y diviértete a lo grande. Tu ser rebozará del más puro optimismo.

En definitiva, no hace falta realizar grandes hazañas o cambiar rotundamente ciertos hábitos. Solo basta darle una vuelta de tuerca a las actividades que realizamos a diario y, sobre todo, a la forma en la que percibimos cada acontecimiento.

Esperamos que pongas en práctica estos consejos y que te animes entonces a abrazar el optimismo cada día de tu vida.

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