No es ninguna casualidad que la opinión general sobre este año al cual solo le quedan pocos días de vida sea bastante negativa. Además de los (poco agradables) asuntos públicos que ocurrieron, al parecer tampoco fue un año demasiado bueno en cuanto a lo personal. ¿Tu 2016 tampoco fue demasiado bueno?
8 cosas que todos tenemos que olvidar para vivir un 2017 lleno de felicidad


Pues si tu 2016 fue fabuloso me alegro mucho por ti, pero si integras el grupo de quejosos de lo malo que fue este pasado año, tal vez deberías olvidar todo esto si no quieres que el 2017 sea igual de malo.
¡Mira a continuación!
Rescatar lo bueno

Si quieres que el comienzo del 2017 sea fresco y maravilloso será necesario que primero olvides todo lo que no te gustó del 2016. Además, seguro hubo muchos aspectos positivos que a menudo pierdes de vista. No permitas que nada opaque el nuevo año.
Lo que no conseguiste

Muchos califican a su año como malo cuando no lograron todo lo que se habían propuesto. Pero a pesar de que tal vez no conseguiste mudarte a un apartamento más grande o no bajaste el peso que deseabas, de seguro tuviste otros logros de los que también deberías estar orgulloso.
Compararte

Si el pasado año no hiciste más que compararte con los demás y permitir que su éxito bajara tu autoestima, ¡deja de hacerlo ahora mismo! Para esto no es necesario que esperes hasta el año que viene, abandona la comparación de inmediato y recuerda que cada uno hace su camino y el ritmo de los demás no debe condicionarte.
Dejarte llevar por los temores

Si te quejas de que tu 2016 no fue bueno, es probable que haya sido un año en el que no tomaste demasiados riesgos. Ya sea porque no te sentías preparado o porque dejaste que tus miedos te vencieran debes tener en cuenta que si lo hubieras hecho no te estarías quejando tanto.
Arriesgarse siempre es positivo: no importa el resultado, lo más valioso es saber que lo intentamos.
Descuidar tu cuerpo

Cuando llegas a tus 20 es hora de reconocer que tu cuerpo necesita algo más que patatas fritas y hamburguesas. Nadie dice que deberías abandonarlas pero sí que incluyas más vegetales y frutas en tu dieta; tu cuerpo estará más que agradecido.
No demostrar lo que sientes

Si este año no aprovechaste a decirles a tus padres ni a tus amigas cuán agradecido estás de tenerlos, es hora de que comiences a hacerlo. Es importante que otros sepan lo importantes que es su presencia en nuestra vida, ¿y cómo lo sabrán si no se los demostramos?
Las personas tóxicas

Otro año que se va y tú todavía te juntas con esas personas que no hacen más que criticarte la reunión entera. ¡Aprende a decirles que no! Puede sonar un poco antipático, pero te aseguro que si quitas a las personas que no contribuyen en nada a tu bienestar, la sensación de liberación será inigualable.
Darte por vencido

Dejar de luchar cuando no todo va como lo planeamos es el peor hábito que podemos tener. A la hora de alcanzar lo que queremos, nos encontraremos con un montón de obstáculos y dificultades que querrán aterrarnos, pero lo importante es seguir adelante y convencernos de que podemos lograrlo.
Olvidar agradecer

Una costumbre que me hizo sentirme muy miserable durante varios años fue cómo daba por sentado ciertos aspectos de mi vida. Se trata de esos pequeños detalles que hacen que nuestra vida sea mejor pero que a menudo olvidamos valorar. Solo cuando dejan de estar allí, nos damos cuenta de lo mucho que influían en nuestra vida.
Si comienzas a ser agradecido hasta con lo más simple, te aseguro que tu vida será mucho más plena.
Como ves, tener un buen año depende pura y exclusivamente de nosotros. No hay fórmulas mágicas que automáticamente hagan que nuestro año sea mejor: todo depende de nuestra actitud y de cómo enfrentamos las adversidades.
¡Por un 2017 increíble repleto de nuevos comienzos y nuevas oportunidades!









