"El yoga consiste en aprender a volver a uno mismo. Consiste en encontrar tus límites, alejar tus limitaciones y ser capaz de relajarte en quien eres verdaderamente". Esta es la definición que propone Christina Brown, la autora de The Yoga Bible.
8 bellas lecciones aprendidas del Savasana


Esta disciplina milenaria suele ser asociada con la ejecución de posturas de gran dificultad. Pero, el yoga es mucho más que eso. De hecho, muchos de sus mayores beneficios derivan de la postura más sencilla: el Savasana o "posición del cadáver". ¿Dudas? He aquí todas las lecciones que nos enseña esta magnífica postura.

#1 ¿Qué es la "posición del cadáver"?
Esta postura de nombre escalofriante es quizá una de las más sencillas del yoga. Consiste en recostarse boca arriba con los brazos y las piernas extendidas. Los ojos deben permanecer cerrados y la respiración tiene que ser profunda. Dura entre 20 y 30 minutos –aunque en las clases de yoga de occidente esta duración se ve notoriamente reducida.

#2 Sus beneficios
La práctica del Savasana aporta muchos beneficios:
- relaja el sistema nervioso,
- alivia el estrés,
- previene el insomnio y mejora la calidad del sueño,
- reduce los dolores de cabeza y la fatiga,
- contribuye a superar la depresión.

#3 Sus lecciones
En general, las más grandes lecciones se esconden en lo más sencillo de la vida y el Savasana es una clara manifestación de esta verdad. Y es que su práctica consciente hace que podamos acceder a una dimensión más plena y pacífica de la realidad. Ahora bien, ¿cuáles son estas enseñanzas? Pues, las que te mostraremos a continuación.

#4 Eres perfecta
La perfección no se alcanza, se ES. No hace falta que te pares de cabeza o que hagas complicadas posiciones de equilibrio. Con yacer sobre el suelo, siendo consciente de que eres quien eres, la perfección ya está en ti.

#5 Eres lo que eres, no lo que haces
Estamos en un mundo que celebra la acción, la superación de metas, el seguir siempre adelante y de no parar nunca. Lo cierto es, sin embargo, que tú eres mucho más que tus acciones. A fin de cuentas, piénsalo bien, ¿quién es el que verdaderamente las lleva a cabo?

#6 A veces, soltar es lo mejor
Hay cosas que, sencillamente, escapan de nuestro control. Entonces, ¿qué sentido tiene darle vueltas a esos asuntos que no podemos resolver? Lo más saludable es, en estos casos, soltar el problema. Esforzarse, trabajar duro y dar lo máximo es importante. Pero, dejar ir y respirar, también.

#7 El silencio vale
La polución sonora del ambiente corroe tu tranquilidad –de eso no hay duda–. Pero, esta no es la peor; lo más dañino es tu barullo interior. Esa vocecita que nunca se calla y que siempre gira en torno a cosas del pasado o del futuro. Este es el obstáculo más grande en el hallazgo de la paz interior y el Savasana hace que esta realidad se torne evidente.

#8 El equilibrio es la esencia de la salud
Para permanecer sanos, hoy hacemos de todo: usamos apps en nuestros celulares para seguir rutinas de ejercicios cada vez más exigentes, levantamos cantidades ridículas de metal para endurecer nuestros músculos y vivimos contando las calorías de todo lo que nos llevamos a la boca. Pero, la esencia de la salud no yace solo en lo que hacemos. También se encuentra, como lo sugerimos anteriormente, en lo que somos. Ser y hacer: es la dialéctica de estas dos dimensiones vitales en donde se esconde el equilibrio.

#9 En la vulnerabilidad hay poder
A diferencia de otras posturas, el Savasana es una postura de apertura total: las palmas se extienden hacia arriba y el corazón yace mirando hacia el cielo. En muy pocas instancias podrás disfrutar de una apertura tan grande haciendo tan poco. Es muy sencillo ocultarse entre las responsabilidades y preocupaciones. Puede resultar difícil, pero hay mucho más poder en el estado de entrega que propone la "posición del cadáver".

#10 Vas a morir
Convengamos que el nombre de esta postura, "la posición del cadáver", no es muy reconfortante. Pero, lo cierto es que nos recuerda una de las más grandes certezas: algún día, seremos un cadáver. Nuestra existencia es frágil y efímera. Por estos motivos, no podemos darnos el lujo de desperdiciarla.
Información recomendada: Asanas de yoga para practicar de noche
Estas son algunas de las lecciones que nos enseña el Savasana. Esperamos que las hayas disfrutado tanto como nosotros. ¡ Carpe diem!









