3 poses de yoga que puedes hacer en tu escritorio

Muchas de nosotras pasamos una gran cantidad de horas sentadas frente a un escritorio trabajando, por lo menos ese es mi caso. Esto, si bien es muy bueno pues nos permite tener nuestros ingresos, repercute directamente sobre la salud de nuestro organismo. Sin embargo, no todo está perdido, ya que existen algunas poses de yoga que puedes hacer sentada en tu escritorio para no perder la flexibilidad.

Comienza meditando

Para comenzar, está recomendado que practiques una sencilla meditación. Para ello, siéntate en la silla con los pies apoyados firmemente en el suelo. Pon tus manos sobre tus muslos y cierra tus ojos. Respira y siente cómo los huesos se enraizan a la silla. Concéntrate en tu columna vertebral mientras alargas tu pelvis hacia afuera. Concéntrate ahora en tu respiración y crea tu propio espacio interno. Al exhalar, deja que la tensión se escape con el suspiro y permite que tu cuerpo sea receptivo a nuevas sensaciones y emociones. 

Pose 1: Giro espinal

Sentada en la silla, estira los brazos hacia arriba. Exhala y gira hacia la derecha, colocando la mano detrás del asiento. Inhala y vuelve con tu cuerpo al centro, y al exhalar repite el giro pero hacia el otro lado. Recuerda que debes mantenerte durante 5 respiraciones cuando gires de cada lado.

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Pose 2: Estiramiento de cuello

Esta es otra pose de yoga para realizar en la oficina. Coloca tu mano derecha en el hombro izquierdo, mientras la palma descansa sobre el pecho. Inclina tu oreja derecha hacia el hombro derecho al mismo tiempo que tratas de alcanzar el homóplato derecho con tu brazo izquierdo. Mantente en esa posición durante ocho a diez respiraciones y repite del otro lado. 

Pose 3: Estirar la cadera

Para hacer esta pose de yoga, cruza el tobillo derecho justo encima de la rodilla izquierda y coloca la palma de la mano izquierda en la planta del pie derecho, al mismo tiempo que colocas la palma derecha en la parte interior del muslo derecho. Mientras mantienes el pie derecho flexionado, empuja hacia abajo y mantente así por 10 respiraciones para repetir del otro lado. 

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Como verás, estos tres ejercicios son muy fáciles de hacer y puedes hacerlos en un momento de descanso o cuando tú quieras. Además, pueden ser practicados por aquellas personas que carecen de movilidad o que recientemente se están iniciando en el mundo del yoga y quieren aprender nuevas asanas. Cuéntanos, ¿conoces otros ejercicios de yoga para realizar en la oficina? ¿Cuáles son? No olvides de escribirnos para comentarnos cómo los haces y cuantas veces al día.