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10 cosas que nos pasan a todas las personas que somos muy distraídas

Imagen NBC

Muchos estudios científicos ya han comprobado que las personas que se distraen fácilmente son en realidad verdaderos genios. Sin embargo, quienes padecemos esa condición de genio, por momentos nos gustaría poder controlar un poco mejor esas distracciones, ya que pueden terminar teniendo consecuencias fatales. 

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Si pertences al club de los distraídos, de seguro te sentirás más que identificado con las siguientes situaciones:

1. Una vez no es suficiente

Para poder concentrarte al 100 % y comprender el significado de una frase necesitas leerla al menos 10 o 20 veces, porque siempre hay algo que llama más tu atención.

2. De repente te acuerdas de aquella vez en que...

Nadie te habla del tema, pero de repente, como por arte de magia viene a tu cabeza un pensamiento sobre aquel día en que comiste el sándwich de pollo más exquisito de tu vida. ¿Antojos acaso?

3. La gente te pregunta si estás bien

Cuando estás con personas que no te conocen tanto, se preocupan por ti e incluso hacen preguntas extrañas. Y tú solo tienes que responder que eres así.

4. Sueles olvidar la comida en el horno

Si eres suficientemente atento, solo sucede una vez por semana que la comida se te quema en el horno. En semanas de mucha distracción puede suceder más de una vez.

5. Olvidas en lo que estabas pensando

Es un hábito olvidar qué era exactamente lo que estabas haciendo o diciendo antes de ponerte a pensar en lo lindo que se ve el día afuera.

6. Te distraes con facilidad 

Cuando intentas concentrarte en algo, absolutamente todo lo que te rodea se vuelve más atractivo.

7. Tus amigos te gritan: ¡Despierta!

Tus amigos ya te conocen y saben sobre tu condición de genio. Por eso, cada vez que pareces volar a otra galaxia, solo tienen que asegurarte de bajarte de ella y regresarte a la Tierra.

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8. Dejas muchas tareas sin terminar

Tus distracciones a veces te juegan una mala pasada y hacen que dejes muchas tareas sin terminar. Pero cuando recuerdas todo eso, ya es demasiado tarde y no tienes tiempo.

9. Pierdes el hilo de las conversaciones

Muchas veces pierdes el hilo de lo que te están diciendo y no queda otra opción que pedir que lo repitan para ti... ¿Puedes repetirme eso?

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10. Tienes muchas ideas brillantes

La cantidad de ideas buenas que vienen a tu cabeza es tan grande que a veces hacen que te quedes mirando un punto fijo por un rato (demasiado) largo.

Ahora bien, algunas de estas situaciones pueden ser un tanto inconvenientes, pero es importante no perder de vista que la razón por la que sucede todo esto es porque en nuestras cabezas estamos procesando muuucha información a la vez y pensando en buenas ideas que revolucionarán el mundo.

¡No permitas que nadie se burle de este gran superpoder!

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