Texto: Cintia Saporito
Aunque como mamás adoremos pasar todo el tiempo posible con nuestros hijos (¡crecen tan rápido!), tarde o temprano llegará esa edad en la cual iniciarán el despegue, y ya no querrán acompañarnos en nuestras salidas diarias. ¿Qué hacer? Mientras que algunas aceptarán rápidamente la idea de que sus niños se queden solos en casa cuando salgan, otras desearán tener a sus compañeros de paseos una temporada más. Te contamos cómo lograr que quieran ir contigo.
No los obligues
Estar con los padres no debería ser una prueba de fuego. Por el contrario, lo ideal es que sea una experiencia feliz y jamás forzada, nos explica la psicóloga especializada en familia y desarrollo infantil, Dra. Gail Gross. Si le agregas tensión a una salida, es probable que vayas a encontrarte con una gran resistencia.
Particípalos
Para lograr que quieran ir contigo, el mejor approach es involucrar a tus hijos en los planes. En lugar de renegar y discutir, la experta propone un empathic process: siéntense juntos en un lugar neutral de la casa (¿la cocina, tal vez?) y bríndales la oportunidad de expresar cómo se sienten acerca de este outing. Déjalos dar su opinión: ¿qué les gustaría hacer? ¿Qué necesitarían para querer participar? Sabiéndose implicados, es más probable que accedan a tu propuesta.
Solos en casa
A pesar de todos tus intentos, puede que tus hijos sigan refunfuñando acerca de la idea de ir contigo a visitar a la abuela o al cine. Si son lo suficientemente maduros, y tienen alrededor de 12 ó 13 años, puede que ya estén listos para quedarse solos en casa, sin la supervisión un adulto, de acuerdo con la organización Safe Kids Worldwide. Sin embargo, es fundamental que verifiques que cuenten con la práctica necesaria para estar seguros mientras no estás: recuerda que su desarrollo mental no ha terminado, con lo cual son más propensos al peligro que los adultos, nos alerta Gross.
Explícales cuál es el comportamiento apropiado si no habrá mayores en casa, y haz algunos ensayos breves. Para esto, aprovecha errands sencillos cerca de casa, que te permitan testear las aguas y regresar rápido en caso de que algo salga mal. Finalmente, no los hagas responsables de cuidar a sus siblings menores. Si son varios los niños que se quedarán en casa, contrata a una profesional. ¿Todo listo? ¡A pasear!









