Torso: El cómic que contó el enfrentamiento entre Eliot Ness y un asesino serial en la vida real

Principios de 1930. En aquel Estados Unidos abatido por la Gran Depresión y la Ley Seca un hombre se convirtió en héroe combatiendo a las mafias y encarcelando a Al Capone. Sin embargo, Eliot Ness posteriormente debió enfrentarse a un monstruo aun más espeluznante: «el asesino de los torsos de Cleveland». La historia real quedó retratada de la mano de Brian Michael Bendis y Marc Andreyko en la maravillosa novela gráfica Torso.

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El amplio mundo de los cómics nos brinda la posibilidad de optar por diferentes subgéneros y formatos. Dentro de ellos se encuentra el policial negro (también llamado serie negra o lo que en cine se conoce como film noir) y la novela gráfica.

De eso se trata Torso, el trabajo de Brian Michael Bendis y Marc Andreyko originalmente publicado en 6 números entre 1998 y 1999 por Image Comics, luego recopilado en 2001 por la misma editorial y finalmente relanzado por la línea Icon de Marvel Comics en 2012.

Eliot Ness, el héroe

Imagen Comixology

Eliot Ness es el clásico héroe norteamericano, viene de luchar con las mafias de Chicago (que controlaban el tráfico de alcohol y el juego) y de poner tras las rejas a Al Capone. Su rostro y logros son portada de todos los diarios del país y noticia en todo el mundo. Tras el rotundo éxito, es contratado en Cleveland para limpiar a la policía y bomberos de los corruptos y poner en orden la ciudad algo que, para el hombre que venció al capomafia, supuestamente resultaría fácil.

Ness comienza a cumplir con su trabajo cuando otra serie de sucesos sacuden la ciudad: la aparición de torsos, brazos, piernas y cabezas a la vera del río. Pronto el «asesino del torso» (también conocido como «el carnicero de Kingsbury Run») se adueña de las pesadillas de los ciudadanos y será Eliot Ness, el intocable, quien deba liderar un nuevo equipo de detectives y forenses para encontrarlo.

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Un comic atípico

Imagen Amazon

Torso no es un policial en blanco y negro como cualquier otro. Bendis realizó finamente sus trazos de una manera atípica e irregular para el formato –conforme a lo que estamos acostumbrados– y, si le sumamos la implementación de fotografías policiales y periodísticas, resulta inevitable sentirse en un contexto asfixiante y lúgubre.

El arte de esta novela gráfica no es ajeno a la historia que se narra y es quizás aquí donde radica el punto más enriquecedor de la misma ya que está basada en hechos reales. Es decir, no se inspira (como se suele utilizar en la actualidad en el cine) o se trata de historia ficcionada (crear un argumento ficticio utilizando acontecimientos reales) sino que es una crónica de los eventos acontecidos con apenas unas permitidas pinceladas libradas a la creatividad de los autores.

Imagen Comixology

La década del 30 fue de las más oscuras en los Estados Unidos. La crisis económica y el incremento del delito convirtieron las calles en noches permanentes. Mafias, matones, policías corruptos y simples ladrones. Todo un país a la deriva buscando en los ojos de un héroe de carne y hueso el reflejo de un camino de esperanza. Eliot Ness representaba exactamente eso en aquel entonces y su espalda sentía que debía responder ante tal responsabilidad.

Eliot Ness, el intocable, ¿podrá encontrar al asesino serial o el caso lo sumergirá en el fin de su carrera? Si no conoces la historia y te gustaría saber qué pasó con aquel oficial del tesoro retratado por Kevin Costner en la película The Untouchables (1987), es un buen momento para leer esta fantástica novela gráfica.