Desde el momento en que anunció su compromiso con el príncipe Harry, Meghan Markle pasó de ser una simple mortal, a formar parte de una de las monarquías más poderosas de todo el planeta.
Un joyero personal y otras cosas geniales a las que Meghan Markle ya tiene acceso

Además de casarse con el hombre que ama, este enlace matrimonial le da a Meghan una serie de privilegios que cualquiera de nosotros querría. Te contamos las cosas más geniales a las que Markle tiene acceso después de su boda.
#1 Joyero real
A partir de ahora, la duquesa de Sussex puede lucir las tiaras, collares y pendientes de la corona real británica, misma que está resguardada en la Torre de Londres, por ser considerada una de las más valiosas del mundo. La primera joya que usó Meghan fue la tiara filigrana, el día de su boda.
#2 Damas de compañía
Si así lo desea, la antes actriz podrá tener un grupo de damas de compañía, mismas que actuarán como sus asistentes personales. Estas mujeres pueden ser elegidas por ella, por su esposo o por la misma reina Isabel.
#3 Adiós impuestos
Como miembro de la Casa de Windsor, Markle está exenta de pagar impuestos. Tampoco puede ser demandada ni sometida a juicios legales, pues tiene inmunidad.
#4 Viajar por el mundo
Al ser esposa del príncipe Harry, Meghan deberá acompañarlo a sus compromisos reales por todo el mundo. Eso supone varios viajes al año, los cuales por supuesto son financiados por la corona. Además, ella no tendrá que preocuparse por la planeación, pues cada detalle será pensado por un secretario especial.
#5 Regalos, regalos y más regalos
Esto es más bien un privilegio y obligación al mismo tiempo. Meghan deberá aceptar todos y cada uno de los regalos que cualquier persona le ofrezca, sin importar lo que sea. Posteriormente, el equipo de publirrelacionistas del Palacio de Kensington se encarga de decidir el destino de esos obsequios, pues no todos se conservan.
#6 Mucha riqueza
Aunque este es un aspecto muy evidente, la cifra es sorprendente. Se calcula que el patrimonio neto de la familia real británica es de 434 millones de euros, considerando propiedades e inversiones. Harry y Meghan vivirá en Nottingham Cottage, la casa del príncipe desde 2013, cuando decidió vivir solo.
También te puede interesar:









