Tom Holland rechazó convertirse en otro superhéroe, pero hizo reír a sus fans

En 2016, el Universo Cinematográfico de Marvel introdujo a Tom Holland en uno de los personajes más queridos de todos: Spider-Man.

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Desde su breve participación en Captain America: Civil War hasta sus películas en solitario, Holland ha demostrado que nació para ser Spidey y aparentemente no hay otro superhéroe que esté dispuesto a interpretar.

Si bien, Chris Evans, Ryan Reynolds, Ben Affleck y otros actores han interpretado a más de un superhéroe, para Tom Holland sólo existe Spider-Man.

Por lo menos eso fue lo que dejó en claro con su corta, pero concreta, respuesta cuando lo propusieron para dar vida un personaje que tiene la habilidad de convertirse en 10 héroes alienígenas. ¿Ya sabes de quién hablamos?

El artista digital SPDRMNKY XXIII, reconocido por sus ilustraciones de famosos superhéroes, pensó a Tom Holland lejos del MCU y le dio una nueva vida en el mundo de Cartoon Network con el papel de Benjamin Tennyson, mejor conocido como Ben 10.

Cartoon Network nos presentó a Ben como un niño de 10 años, por lo que entendemos que cueste trabajo ver a Holland interpretando este rol.

No obstante, el fan art más bien coloca a Tom en este papel durante los sucesos de Ben 10: Alien Force, cuando el intrépido chico ya tiene 15 años; edad no muy lejana al Spider-Man de Tom en el MCU.

A pesar de lo atractivo que puede ser tener la habilidad de convertirte en 10 monstruos alienígenas, Tom rechazó con un simple y concreto «No» la posibilidad de verlo como Ben.

Ante el post de Instagram que invita a Netflix a producir un live-action de Ben 10: Alien Force protagonizado por Tom, el joven actor dejó en claro su opinión.

Si bien, Holland no da una explicación ante su negativa, es comprensible que no le llame la atención este superhéroe.

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No sólo porque tiene la oportunidad de interpretar a uno mucho más famoso y reconocido como Spider-Man, sino también porque el joven actor está aventurándose a nuevos horizontes cinematográficos con papeles mucho más maduros como el del perturbado Arvin Russell en El diablo a todas horas.

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