Cuando estamos enamorados queremos bajarle las estrellas del cielo a nuestr@ amad@. Si vemos una estrella fugaz, le pedimos un deseo. Cuando alguien está feliz, tiene los ojos llenos de estrellas. Muchos sueñan con convertirse en estrellas, y expresamos nuestros deseos de triunfar diciendo que queremos alcanzar las estrellas. Estos símbolos están presentes en nuestra vida diaria en casi todos los aspectos. Ahí radica la popularidad de los tatuajes de estrellas en la nuca.

La estrella más allá de un cuerpo celeste que brilla con luz propia en el espacio, es todo un símbolo cultural. Qué sería del poeta, del escritor, de los soñadores, de los enamorados, sin la estrella como ese ícono de la eternidad, como esa luz brillando en la oscuridad, como la belleza del universo que nos cubre.

Siempre que pensamos realizarnos un tatuaje debemos tener en cuenta algunas reglas básicas, debemos considerar el tamaño, el lugar, la casa donde nos tatuaremos, los cuidados posteriores... Pero hay algunos sitios en los que conviene tener un poco más de precauciones, pues son lugares donde mucha gente luego se arrepiente de haberse tatuado. Uno de ellos es la nuca, un lugar que no siempre vemos.

Si hay un tatuaje que no pasa desapercibido es el de los ojos en la nuca: un tatuaje eminentemente realizado para llamar la atención. Ya hemos visto sobre los ojos y los diseños de tatuajes de ojos, y sabemos que son un símbolo sumamente poderoso. Y si los ponemos en la nuca (o zonas aledañas... ya que esta no es exactamente la nuca) lo son aún más.

Harto de ver que la nuca era reiteradamente abusada por los típicos tatuajes de un código de barras, un nombre, o un dibujito ridículo, decidí que debía encontrar otra cosa diferente. Y se me ocurrió el surface piercing como una muy buena posibilidad.