En cualquier obra del subgénero zombie siempre habrá un alto contenido de confrontación, es inherente a este tipo de estructura argumental. Ya sea en contra de los zombis o en contra de otros personajes, la violencia es un factor ineludible. Por eso mismo, es que las armas juegan un papel casi central en cualquier película, serie, corto, videojuego o cómic que incluya a muertos vivientes (o alguna otra clase de ser similar al zombi) y, en muchos casos, adquieren un carisma propio que suele estar asociado a aquellos que las portan.

En 2015, Netflix estrenó la serie Daredevil, basada en el vigilante enmascarado del mismo nombre. Un abogado que quedó ciego en su niñez tras un accidente con químicos que aumentaron de manera sobrehumana sus cuatro sentidos restantes, y decide usar su entrenamiento marcial para proteger las calles de su vecindario del crimen organizado.

Las películas de superhéroes son muy populares ahora gracias al Universo cinemático de Marvel y DC. Pero hubo un tiempo en el que los estudios sólo lanzaban cintas de nuestros héroes favoritos sin crossovers, ni planes para secuelas.

El 2017 se fue y nos dejó muchas series nuevas fantásticas y temporadas que todos esperábamos, como Legion, el aporte de FX basado en el personaje de Marvel; American Gods, la adaptación de la novela de Neil Gaiman realizada por Amazon, o la segunda temporada de Stranger Things, producida por Netflix, entre tantas otras series.

Stan Lee es un dios para todos los que amamos los cómics. El hombre se casó con la mujer de sus sueños, crearon un imperio millonario y ahora todos lo conocen como la persona que los llevó a universos increíbles donde todo era posible.

La promesa de ver en una épica saga a los memorables personajes de Watchmen habitar el tradicional Universo DC y coexistir con clásicos superhéroes como Batman y Superman, ha hecho de Doomsday Clock una de las series más destacadas y anticipadas de DC Comics y de la iniciativa Rebirth, que concluirá con ésta.