Daniella Álvarez

Amara La Negra recibió a las participantes de Nuestra Belleza Latina con una mansión vacía y les comentó que todas las comodidades se las tendrán que ganar. Las chicas se dividieron en dos equipos y se enfrentaron a un reto de obstáculos, donde el equipo ganador obtuvo como premio el derecho a tener camas.

La tercera gala de Nuestra Belleza Latina estuvo llena de emociones y emotivos momentos por la ausencia de Alejandra Espinoza, quien se encuentra recuperando su salud. Sus compañeros no pararon de desearle buenos deseos, delante y detrás de cámaras, esperando tenerla de regreso "más fuerte que nunca".

Mientras Alejandra Espinoza se recupera, Giselle Blondet tomó la batuta de este tercera gala, al término de la cual ya se tuvo a las 10 finalistas de donde más adelante será elegida la nueva reina de Nuestra Belleza Latina; sin embargo, también tuvimos una sorpresa, pues todas las chicas que permanecen en la competencia se encuentran en riesgo de ser eliminadas.

En esta nueva sección, en la cual las participantes de Nuestra Belleza Latina podrán confesarse, la puertorriqueña se enteró que había sido la elegida por la cubana, cuando estaba en riesgo de ser eliminada, para quitarle su lugar en la mansión, así que no dudó en responderle y la tensión del momento llegó hasta el jurado.

Al ser considerada la participante que tuvo la mejor actuación en el desafío impuesto por Greidys Gil, Nuestra Belleza Latina 2009, Sirey se hizo acreedora a un premio que aprovechará con sus seres queridos; sin embargo, los jueces le adelantaron que por su experiencia le exigirán más en los siguientes retos.

La participante se sinceró al decir que el huracán que le tocó cubrir en su reto arrasó con ella, idea que fue secundada por la juez Daniella Álvarez, quien le recomendó modular su tono de voz, mientras que Adal Ramones le pidió a ella y a sus compañeras planear mejor sus presentaciones.