Una pareja de adultos mayores, padres de una mujer autista que fue hallada muerta y en deplorables condiciones en un sofá de su casa, han sido acusados de asesinato en segundo grado.
Unos padres son acusados de matar a su hija con autismo: la dejaron en un sofá con heces y orina durante más de una década
Tras el hallazgo de la víctima de 36 años, las autoridades indicaron que era “difícil imaginar cómo alguien puede llegar a ese estado sin que la familia o los amigos intervengan” y que simplemente “no se puede dejar que alguien se pudra”.

Clay Fletcher y Shelia Fletcher, de 65 y 64 años, fueron señalados como responsables de la horrorosa muerte de su hija, Lacey Ellen Fletcher, de 36 años, quien fue hallada muerta el pasado 3 de enero, “fusionada” en un hoyo de un sofá lleno de heces y orina, explicó la cadena WAFB.
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El gran jurado de Clinton, Louisiana, acusó a la pareja de adultos mayores, luego de que el sheriff de East Feliciana, Jeffery Travis dejara claro que “se debería haber intervenido mucho antes de la tragedia” que terminó con la vida de la mujer.
Lacey, quien sufría una rara condición neurológica que le impedía mover sus músculos, conocida como el síndrome de enclaustramiento, fue dejada sentada en un sillón viejo de su casa, probablemente por más de una década.
Cuando las autoridades la encontraron muerta, Lacey estaba sentada en posición vertical, parcialmente desnuda, sumida en un agujero que se fue haciendo y que estaba lleno de heces, orina e insectos a su alrededor, e inclusive en su abdomen y rostro.
El examen del médico forense explicó que Lacey tenía úlceras de decúbito hasta el hueso y que podría haber estado pegada al mueble durante unos 12 años.
Tras conocer estos detalles, Travis explicó que era “difícil imaginar cómo alguien puede llegar a ese estado sin que la familia o los amigos intervengan” y que simplemente “no se puede dejar que alguien se pudra”.
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La noticia sobre la muerte de Lacey, e incluso de su existencia poco conocida por varios vecinos, terminó por conmocionar a la comunidad, quien consideraba a la pareja como un matrimonio “respetado” e incluso eran vistos como “pilares” de la zona.
El Fiscal de Distrito Judicial, Sam D'Aquilla, fue tajante al decir que claramente se trata de un asesinato intencionado. “¿Querían matarla? Yo digo que sí”, le dijo a Law & Crime.
Hasta el momento no se ha establecido una fecha para el juicio contra los padres.

