Un trozo de tela manchado con sangre del papa Juan Pablo II era mantenido protegido como reliquia en la Catedral de Colonia, Alemania, hasta el pasado domingo que fue robado.
Un trozo de tela manchado con sangre del papa Juan Pablo II era mantenido protegido como reliquia en la Catedral de Colonia, Alemania, hasta el pasado domingo que fue robado.