Cuando se aprobó, hace casi una década, la Ley de Cuidado Asequible (ACA por sus silgas en inglés), la promesa de cobertura en salud finalmente se convirtió en una realidad para más de cuatro millones de latinos en Estados Unidos, incluyendo 600,000 niños. Desde entonces, ningún problema ha sido más importante para las familias latinas que el cuidado de la salud. Y no sorprende por qué: nuestra calidad de vida mejora cuando tenemos acceso a una buena atención en salud.
Los ataques republicanos al sistema de salud amenazan la cobertura médica para millones de personas
“La eliminación de nuestras leyes actuales de atención en salud perjudicaría gravemente a los estadounidenses en todos los ámbitos de la vida”.


Pero en lugar de construir sobre lo ya logrado por las familias hispanas, los republicanos quieren hacer retroceder nuestro sistema de atención médica. Durante años, el presidente Trump y los republicanos del Congreso han estado tratando de eliminar sistemáticamente los beneficios obtenidos gracias al ACA, poniendo en peligro la misma cobertura que brindó un alivio esencial para millones de latinos y millones de estadounidenses con condiciones preexistentes.
El ataque más reciente se está llevando a cabo en los tribunales: el presidente Trump y los republicanos han duplicado su apoyo a ‘Texas vs. EE.UU.’, una demanda que ha cuestionado la constitucionalidad de todo el sistema, desde la cobertura de Medicaid para millones de personas hasta las protecciones para personas con condiciones preexistentes y la reducción en los costos de los medicamentos recetados a las personas mayores. Si la administración se sale con la suya, decenas de millones de personas verán revocada su cobertura de salud y sus costos se elevarán a niveles vertiginosos. También se perderían protecciones vitales para 133 millones de estadounidenses con condiciones preexistentes, que pueden ser cualquier cosa, desde cáncer hasta diabetes, e inclusive asma. Si la administración gana el caso, 133 millones de estadounidenses perderían su derecho garantizado de acceder a un seguro de salud y podrían pagar cantidades exorbitantes solo porque están enfermos.
La eliminación de nuestras leyes actuales de atención en salud perjudicaría gravemente a los estadounidenses en todos los ámbitos de la vida. Le haría daño a millones de familias que dependen de los créditos fiscales y de la expansión de Medicaid introducidas por la Ley de Cuidado Asequible para poder cuidar de sí mismos y de sus hijos. Le haría daño a millones de millennials, que buscan trabajo de tiempo completo y que necesitan un seguro de salud para adaptarse a sus vidas siempre cambiantes. Le haría daño a los estadounidenses mayores que dependen de medicamentos recetados de bajo costo. Y perjudicaría a los padres trabajadores, quienes sin seguro de salud podrían verse obligados a elegir entre un viaje a la sala de emergencias para sus hijos y el pago de los alimentos familiares.
Por supuesto, este ataque perjudicara especialmente a la comunidad hispana. Muchos latinos tienen familiares que sufren desproporcionadamente de diabetes, enfermedades hepáticas, obesidad, asma y cáncer. De hecho, entre ocho y 20 millones de hispanos tienen una condición preexistente.
Mientras tanto, los demócratas están haciendo todo lo posible para combatir estos ataques. Los senadores demócratas han introducido un proyecto de ley que defiende la protección de las condiciones preexistentes y protege a los consumidores de los planes de seguro basura. Justo el mes pasado, los demócratas en la Cámara de Representantes aprobaron legislación bipartidista que combatiría el sabotaje a la atención en salud de la administración Trump. También reforzaría la protección para las personas con condiciones preexistentes, revertiría la horrible expansión de los planes de seguro basura de la administración Trump –que no cubren los tipos de atención más importantes, como los medicamentos recetados y la atención de salud mental–, y ayudaría a que más estadounidenses y más latinos, obtengan la cobertura de salud que necesitan.
Lamentablemente, ninguno de estos proyectos de ley ha recibido atención del líder republicano del Senado, Mitch McConnell. De hecho, los senadores republicanos han bloqueado hasta ahora la solicitud de los senadores demócratas de someter los proyectos de ley a votación. Es vergonzoso, pero no sorprendente: el líder McConnell ha ignorado más de 100 proyectos que han sido aprobados por la Cámara. Básicamente, ha convertido al Senado en un cementerio legislativo, donde incluso piezas de legislación bipartidistas y no controvertidas están siendo enterradas indefinidamente.
No hay tiempo que perder. La atención en salud debe ser un derecho, no un privilegio. El pasado noviembre, el pueblo estadounidense habló alto y claro al decir que el gobierno federal debería trabajar para hacer que la atención en salud sea más asequible. La atención médica fue el tema número uno en la mente de los votantes en las encuestas de salida de todo el país. Así que la falta de acción en el Senado republicano es desconcertante.
Nosotros, los demócratas del Senado, estamos pidiendo al líder McConnell que ponga fin a su vergonzoso cementerio legislativo y traiga a votación el tan necesario proyecto de ley de atención en salud. Los estadounidenses han dejado en claro que debemos actuar, y los demócratas trabajaremos como podamos para asegurarnos de cumplir nuestra promesa de proteger la atención en salud para todos los estadounidenses.
Los riesgos son demasiado altos para que las familias y las comunidades asuman esta carga por su cuenta.
Nota: La presente pieza fue seleccionada para publicación en nuestra sección de opinión como una contribución al debate público. La(s) visión(es) expresadas allí pertenecen exclusivamente a su(s) autor(es) y/o a la(s) organización(es) que representan. Este contenido no representa la visión de Univision Noticias o la de su línea editorial.







