Si me causaron asco las bajezas pronunciadas por Donald Trump sobre las mujeres en el notorio video que ha sacudido los cimientos de su campaña, más asco me ha producido la reacción convenenciera del Partido Republicano y de algunas de sus principales figuras, esas que solo ahora condenan a su nominado y algunos le retiran su apoyo, a pesar de que llevaba más de un año ofendiendo a diversos sectores de nuestra sociedad.
El sátiro Trump contra las cuerdas
“Como Trump no es honorable y sí un egoísta, es poco probable que se retire, de manera que el Partido Republicano tiene que aceptar que el Frankenstein que creó amenaza con llevárselos a todos al mismo infierno”.


Esta sorpresa de octubre ha hecho que varias figuras republicanas le retiren su apoyo a Trump y algunos incluso le han pedido que se retire de la contienda, lo que haría solo una persona honorable que anteponga su partido a su persona. Y como Trump no es honorable y sí un egoísta, es poco probable que se retire, de manera que el Partido Republicano tiene que aceptar que el Frankenstein que creó amenaza con llevárselos a todos al mismo infierno.
La pregunta obligada es por qué lo ocurrido ahora es la gota que derramó la copa para muchos de estos políticos. La respuesta es que 53% de los electores de este país son mujeres, las mismas que Trump ofendió no solo con palabras asquerosas e insultantes, sino con las acciones que según él le son permitidas por ser famoso: asaltarlas sexualmente.
Pasemos revista a algunos de los insultos proferidos por Trump: los inmigrantes son criminales y violadores; sobre las mujeres han sido tantos, pero recordemos cómo atacó a la presentadora de Fox, Megyn Kelly, por recordarle todos los epítetos que ha lanzado en contra de las mujeres: Trump dijo que Kelly estaba furiosa y le salía sangre de los ojos y quién sabe de dónde más.
Dijo que el juez federal Gonzalo Curiel, nacido en Indiana de padres mexicanos, no podía ejercer independencia judicial en el caso que preside contra la Trump University porque "es mexicano"; promovió que se prohibiera el ingreso de musulmanes a Estados Unidos y luego, cuando el padre de un héroe de guerra estadounidense de origen musulmán, Hamayun Khan, le increpó en un mensaje en la Convención Nacional Demócrata, Trump atacó a la compungida madre del soldado diciendo que no habló quizá porque su religión no se lo permite.
Se burló de un periodista discapacitado y dijo que no considera al senador republicano, John McCain, un héroe de guerra porque fue capturado. Se enfrascó también en una épica batalla con la ex Miss Universo, Alicia Machado, a quien en su momento, asegura ella, le llamó “Miss Piggy” porque subió de peso y “Miss Housekeeping” por ser latina.
Trump promovió la racista y descabellada idea de que el presidente Barack Obama nació en Kenya y no en Hawaii. Trump ha encabezado una campaña de xenofobia, violencia, racismo y sexismo que ha alborotado a los peores segmentos de nuestra sociedad y muchos de sus rallies lo comprueban.
Trump se atreve a responsabilizar a Hillary Clinton por las pasadas infidelidades de su esposo, el expresidente Bill Clinton, y en el colmo de la hipocresía también señala a Bill Clinton a pesar de que el propio Trump ha hecho noticia en materia de adulterio.
Solamente ahora que Trump amenaza sus escaños con su más reciente escándalo es que lo condenan o le retiran su apoyo. Una reacción estratégica y no realmente sentida.
El convenenciero Partido Republicano lleva años enfrascado en una guerra civil entre sus sectores extremistas y los más moderados que con la nominación de Trump hizo crisis y se ha exacerbado con cada escándalo del nominado. Luego de la vergüenza de la nominación de Trump y de su propia vergüenza por permitirle todo, el Partido Republicano deberá decidir su rumbo, porque el del sátiro Trump y sus huestes lo han llevado a la ignominia.
Nota: La presente pieza fue seleccionada para publicación en nuestra sección de opinión como una contribución al debate público. La(s) visión(es) expresadas allí pertenecen exclusivamente a su(s) autor(es) y/o a la(s) organización(es) que representan. Este contenido no representa la visión de Univision Noticias o la de su línea editorial.







