“Perdí lo más precioso que tenía, mis hijos": el testimonio de una sobreviviente del ciclón que devastó Mozambique
A principios de marzo el poderoso ciclón Idai golpeó las costas del sudoeste de África y su fuerza dejó al menos 800 personas muertas. La inusual tormenta devastó zonas que se creían a salvo de inundaciones y una de las víctimas es una joven madre perdió a sus pequeñas hijas. Esta es su historia.
María Jofresse no podía encontrar las tumbas de sus dos hijas pequeñas, aunque ella misma las ayudó a cavar. Llora cuando recuerda el momento en que las niñas fueron arrebatadas por las aguas de la inundación que generó
el poderoso ciclón Idai cuando golpeó el sudoeste de África a principios del mes de marzo.
Zohra Bensemra/Reuters
PUBLICIDAD
2/10
La noche que llegó el ciclón Idai Jofresse se refugió en la casa de su suegra con su esposo y sus hijas de 6 meses y cuatro años. Al día siguiente
el río al lado de la aldea se desbordó y la familia huyó tratando de llegar a la carretera principal, en un terreno más alto.
Zohra Bensemra/Reuters
PUBLICIDAD
3/10
Pero el agua era demasiado rápida. Temiendo que se ahogaran, la familia se subió a un árbol de nueces. Durante 11 horas se aferraron a sus ramas y Jofresse acunó a la bebé mientras su esposo sostenía a su hija mayor. A las 10 pm, en la oscuridad total, el diluvio arrancó el árbol de raíz y separó a la familia dentro del agua.
Zohra Bensemra/Reuters
PUBLICIDAD
4/10
Jofresse sobrevivió al sostenerse en otro árbol. Al día siguiente, desplazándose por el agua ahora estancada encontró a su marido y juntos buscaron a las niñas. En la mañana del cuarto día encontraron el cuerpo de la mayor y por la tarde a la bebé, ambas sin vida.
Zohra Bensemra/Reuters
PUBLICIDAD
5/10
Las pequeñas son dos de las más de 800 personas que murieron a consecuencia del paso del ciclón Idai en Mozambique, Zimbabwe y Malawi. Después de cavar las dos tumbas, la pareja se unió a otras familias en un campamento ubicado a pocas millas de donde quedó su hogar destruido. Allí debe hacer fila junto a otros sobrevivientes para recibir ayuda humanitaria.
Zohra Bensemra/Reuters
PUBLICIDAD
6/10
"Nos quedamos aquí porque no hay donde volver", dijo Jofresse, a la agencia Reuters. No es la primera vez que pierde un hogar. En el 2000, cuando solo tenía 5 años, devastadoras inundaciones destruyeron la casa donde vivía con su familia en otra aldea. En la fotografía Jofresse lava sus ropas en aguas de la inundación junto otras mujeres.
Zohra Bensemra/Reuters
PUBLICIDAD
7/10
En el año 2000 el gobierno trasladó a su familia a una nueva comunidad, Cheia (inundación en portugués), construida para aquellos que no tenían dónde ir después de ese desastre. En la foto Jofresse junto a sus padres en el nuevo campamento donde se ahora refugian.
Zohra Bensemra/Reuters
PUBLICIDAD
8/10
El nuevo lugar fue elegido por las autoridades porque estaba en un terreno más alto y menos propenso a las inundaciones. Según el padre de Jofresse la zona donde fueron instalados después de la inundación de hace casi 20 años "estaba destinada a estar a salvo", pero fue devastado por Idai.
Zohra Bensemra/Reuters
PUBLICIDAD
9/10
El secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, dijo que la catástrofe en Mozambique es "otra campana de alarma" sobre los peligros del calentamiento global, que los científicos dicen que hará más frecuentes las tormentas devastadoras como el ciclón Idai.
Zohra Bensemra/Reuters
PUBLICIDAD
10/10
"La gente sufrió de verdad, pero nadie sufrió como yo porque perdí las cosas más preciosas que tenía: mis hijos", dijo la joven. Después de una semana sin que llegara ayuda al campamento al fín Jofresse pudo llevarse algunos paquetes de insumos y al abrirlos descubrió que traían pañales. Los dejó a un lado.