"Dios siempre estuvo a mi lado", dice Melissa Lucio en una carta a semanas de que frenaran su ejecución
HOUSTON, Texas.- El 25 de abril de 2022 fue un día "muy especial" para Melissa Lucio. Poco después del mediodía, uno de sus abogados, Tivon Schardl, llamó por teléfono a John Lucio y a la propia Melissa para informarles de que la Corte de Apelaciones Criminales de Texas había parado la ejecución. Todos lloraron. Ellos desde el lobby del hotel Holiday Inn de Gatesville, donde se hospedaban; ella desde la prisión Mountain View Unit, donde está recluida, en el corredor de la muerte. La familia estaba a dos días de la ejecución de esta hispana. No podían creer lo que estaba pasando.
"Nunca perdí mi fe en Dios", respondió Melissa Lucio sobre aquella noticia, en una carta que escribió a Univision Noticias con fecha de 5 de mayo de 2022. "Sabía que él me acompañaría en esta batalla, como lo ha hecho en el pasado", se lee en el papel redactado a máquina.
"Él me ha dado la paz que sabía iba a necesitar para poder ayudar a John y a mi nuera Michelle y que sintieran la misma paz (...) Todo lo que digo es que Dios siempre estuvo a mi lado", dice.
Ese 25 de abril varias cosas podían pasar. A la 1:30 pm se esperaba que la Junta de Clemencias y Perdones de Texas hiciera una recomendación al gobernador del estado, Greg Abbott, sobre el caso. En casos como el de Melissa Lucio, con una condena capital, podían sugerirle que le diera clemencia o que no. Si Abbott aceptaba la recomendación de darle clemencia la condena podía ser conmutada a cadena perpetua y se aplazaba la ejecución. Ese era un buen escenario para la familia. Pero la noticia que recibieron fue aún mejor.
Era un fallo que esperaban desde la Corte de Apelaciones Criminales de Texas: no solo frenaba la ejecución de Melissa Lucio, sino que le abría la puerta a un nuevo juicio en el que pudiera presentar evidencias sobre su inocencia, algo que no hizo su defensa en el primero, cuando terminó condenada a muerte.
Tras el anuncio sobre la detención de la ejecución de Lucio, la familia hizo un acto simbólico en un parque de Brownsville el mismo 27 de abril a las 6:00 pm, justo el día y la hora en que su madre iba a recibir la inyección letal. Ese día lloraron, inevitablemente: "¡Melissa está viva!", gritaron una y otra vez cuando se hicieron las 6:00 pm. En una fuente de agua lanzaron 15 flores blancas, una por cada año que ha estado presa desde que fue detenida y condenada por la muerte de su hija menor, Mariah.
En la carta a Univision Noticias, Melissa Lucio cuenta que el fin de semana del 8 de mayo recibiría de nuevo la visita de sus hijos. "Siempre los extraño tanto. Ese mismo día, cuando se regresaron al hotel y yo volví a mi celda", cuenta sobre el día en que la corte frenó la ejecución, "ya los extrañaba. Al volver a esos días (previos a la ejecución) siento que estuvieron tan cerca, ¡lo estuvieron!".
La hispana despide la carta con preguntas para su remitente y asegurando que "seguirá aquí", en Mountain View, a la espera de un nuevo intercambio. "Cordialmente, Melissa", firma.
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