- El izquierdista Andrés Manuel López Obrador fue el blanco de las críticas de sus contendientes en el primer debate presidencial de esta campaña. Casi todas las respuestas de los candidatos, independientemente del tema al que se refirieran, iban acompañadas con una alusión directa al candidato de Morena. A López Obrador no le alcanzaban las dos réplicas de 30 segundos establecidas por el reglamento de debate para responderles.
- El candidato independiente Jaime Rodríguez Calderón, alias 'El Bronco', sorprendió con su propuesta de “mocharle la mano“ a todo aquel que robe. Sin salir de su perplejidad, la moderadora Azucena Uresti le preguntó si hablaba literalmente y él respondió que sí, y agregó que de llegar a la presidencia de México presentaría una iniciativa legislativa ante el Congreso para aplicar este castigo a los ladrones.
- Ricardo Anaya, líder de la coalición Frente Ciudadano por México (PAN-PRD-MC), atacó sistemáticamente las propuestas de López Obrador, valiéndose de carteles y fotografías y citando pasajes concretos de su plan de gobierno. Al final del debate, se presentó a sí mismo como la única opción viable para derrotar al candidato de Morena, a pesar de que invirtió poco tiempo en desarrollar sus propuestas de gobierno.
- El candidato José Antonio Meade cargó con los reclamos de los demás candidatos sobre los escándalos de corrupción que han caracterizado la gestión de gobierno de su partido (PRI) durante la presidencia de Enrique Peña Nieto. A lo largo de su mandato, los nombres de altos funcionarios de su gobierno, y el suyo mismo, han salido a flote en investigaciones como 'La estafa maestra' (que acusa al gobierno de desviar más de 400 millones de dólares).
- La exprimera dama y candidata independiente Margarita Zavala también tuvo que responder a las críticas contra el mandato de su esposo, el expresidente Felipe Calderón. Al ser la única mujer en la contienda por la presidencia, trató de emplear un discurso de género para ganar votos a su favor.







