La corresponsal Núria Garrido asegura que ella y su equipo tuvieron que abandonar Kiev y cambiar de locación varias veces para evitar el peligro desde el inicio de la invasión de Rusia y los bombardeos, que se escuchan principalmente en las madrugadas. Cuenta que miles de personas buscan refugios y tratar de huir a Polonia, donde están recibiendo a los ucranianos sin ninguna restricción.
Más información aquí.