Acusados de colaborar con 'los comunistas' del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), cientos de civiles hombres, mujeres y niños fueron asesinados por el ejército y dejados a la intemperie en 1981, en varios caseríos del noreste del país centroamericano. 'La masacre de El Mozote’, como se conoce este episodio, y otras matanzas de la guerra civil centroamericana quedaron impunes por la ley de amnistía que desde 1993 prohibió perseguir judicialmente los criminales de guerra, que entre 1980 y 1992 dejaron unas 75.000 víctimas y más de 8.000 desaparecidos.