La música de este canadiense cambió para siempre cuando descubrió su latinidad en México

Boogat es un québécois de madre mexicana y padre paraguayo cuya carrera musical dio un giro cuando empezó a cantar en español.

Imagen Maisonnette Music

Por María José Cortés

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Al nacer en Canadá de padres latinoamericanos, el músico Boogat había vivido preguntándose hasta qué punto era latino. Fue en un viaje al sur donde encontró la respuesta: “Venir a México me permitió descubrir mi latinidad y me hizo entender que la cultura pasa por la sangre, mucho más de lo que uno piensa. Si hay un punto geográfico en el que me siento en casa es en la Ciudad de México”.

En esencia, Boogat es todo lo que Donald Trump desprecia: un hijo de inmigrantes, enamorado de Latinoamérica, que canta en español y que fusiona la electrónica con la cumbia, el tropical bass y el reggaetón con resultados brillantes.

Su –bastante larga— carrera está dividida en dos etapas: la primera inició en la adolescencia, justo un día después de escuchar el álbum Prose Combat de MC Solaar. En ese periodo grabó tres discos de rap en francés y recorrió buena parte de los escenarios de la provincia de Quebec. Pero todo cambió en 2010: “Puse más atención a mi entorno y a las diferencias culturales entre Canadá, México y Latinoamérica. Además, empecé a cantar en español y me enfoqué en escribir letras para ir hacia el otro, en lugar de buscar que los otros vinieran a mí”, dijo en entrevista para Uforia Music.

La decisión de dejar el francés para cantar enteramente en español fue un parteaguas en su carrera: las giras, los festivales y las invitaciones a colaborar con otros músicos no han parado desde entonces. Justo ahora, Boogat viene de una intensa gira de verano por Estados Unidos, la cual acaba de reanudar con un mes de presentaciones en Europa.

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Otro punto de inflexión en la carrera de Boogat se dio cuando empezó a viajar regularmente a Argentina y a México para trabajar con músicos locales. “ El Dorado Sunset (2013) es el cliché de lo que un norteamericano concibe como música latina. Las letras, aunque están en español, en realidad expresan las ideas de un québécois sobre los ritmos latinoamericanos”, dijo.

A pesar de sus carencias, El Dorado fue un primer paso esencial para el salto importantísimo que significó Neo-Reconquista (2015): un álbum muy superior por donde se le vea, en el que encontramos una lírica sustanciosa, arreglos mucho más efectivos y una visión genuinamente latinoamericana. El léxico y la música de las calles de la Ciudad de México dejaron su huella en él.

Una vez establecido ese contacto con sus raíces, a Boogat le quedó bastante claro que ya no había vuelta atrás. “Llevo cuatro años visitando la Ciudad de México para tocar, inspirarme, escribir y trabajar con músicos locales”, dijo. Ahora mismo estoy trabajando en mi nuevo álbum con Andrés Oddone, un productor de Córdoba, Argentina, con quien tenía años queriendo hacer un disco”.

A unas semanas de las elecciones más mediáticas de la historia reciente de Estados Unidos, el músico está convencido de que los latinos no debemos tenerle miedo a un tipo anaranjado que pasa demasiado tiempo en el salón de bronceado: “Está lleno de mentiras. Si llega a ganar, no creo que realmente pueda cumplir sus amenazas. Quizás nos enfrentaríamos a un escenario muy difícil, pero el intercambio cultural y las migraciones continuarán, pues eso es algo que ningún presidente puede cambiar”.

El lanzamiento de su nuevo álbum está programado para los primeros meses de 2017. Más información en Boogat.com.