¿Sabes cómo reaccionar ante una amenaza? Sigue estos consejos para mantenerte a salvo
Ante los recientes tiroteos en el Área de la Bahía y la masacre en una escuela de Uvalde, Texas, te ofrecemos las siguientes recomendaciones para reaccionar ante una amenaza inminente, ya sea en persona, por teléfono o por internet.
Para reaccionar adecuadamente ante una amenaza inminente, el FBI ha emitido una serie de recomendaciones para mantenerte a salvo.
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Amenaza física en persona. Este tipo de amenaza se da cuando te encuentras en peligro inminente debido a la cercanía de un potencial agresor. Ante una amenaza física, tienes tres opciones: correr, esconderte o pelear.
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Correr. Identifica una ruta de escape, tira cualquier pertenencia que pueda retrasarte y si es posible ayuda a otros a escapar. Llama al 911 en cuanto te sea posible.
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Esconderte: ocúltate de la persona que te amenaza, bloquea las puertas y entradas, silencia tu teléfono celular (incluido el modo de vibración) y permanece en silencio hasta que termine la amenaza.
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Pelear: este debe ser el último recurso y solo debes acudir a él cuando tu vida se encuentre en peligro inminente. Deberás intentar incapacitar la amenaza y actuar con la mayor violencia posible, según la recomendación del FBI.
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Amenaza verbal en persona. Este tipo de amenaza no te pone en peligro de inmediato, pero podría escalar posteriormente a un incidente violento.
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Ante una amenaza verbal en persona, debes registrar exactamente la amenaza y detalles de la persona que la hizo, como nombre, apariencia, color de piel, sexo, altura, peso, color de cabello y ojos, voz, ropa o cualquier otra característica distintiva. Luego debes reportar a la policía.
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Amenaza telefónica. Este tipo de amenaza se hace por teléfono, por lo que debes poner atención a lo que se te dice y valorar si corres peligro inminente.
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Ante una amenaza telefónica, mantén la calma y evita colgar. Trata de mantener en la línea a la persona el mayor tiempo posible para determinar si la amenaza es real o no y si tú u otras personas corren peligro. De ser posible, pide a otras personas que escuchen la llamada y que llamen a la policía.
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Puedes tomar una captura de pantalla del teléfono o intentar grabar discretamente la conversación. Después debes transcribir con exactitud el contenido de la llamada y estar disponible para dar estos detalles a la policía.
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Amenaza mediante mensaje electrónico. Este tipo de amenazas se hacen a través de correos electrónicos, mensajes directos en plataformas electrónicas y en redes sociales.
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Para evitar mensajes electrónicos amenazantes no abras archivos adjuntos de remitentes desconocidos ni te comuniques con personas desconocidas ni abras solicitudes no pedidas. Siempre verifica que tus dispositivos tengan el nivel más alto de protección.
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Ante un mensaje amenazante, no borres su contenido, pues puede servir a las autoridades para una investigación. Procura mantenerlo abierto en tu dispositivo y llama de inmediato a la policía. Imprime el mensaje, tómale una foto y registra la fecha y la hora en que te llegó. Procura guardar todas las pruebas electrónicas relacionadas con el mensaje.
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Ataque cibernético. Un ataque de
este tipo puede comprometer tu dispositivo electrónico y exponer información personal.
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Para evitar ataques cibernéticos, debes usar contraseñas seguras y no repetirlas en otros sitios. Además, debes contar con antivirus y antimalware actualizados y permitir que tu dispositivo se actualice automáticamente. Una buena recomendación de seguridad es contar con autenticación de dos factores.
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Ante un posible ataque cibernético debes llamar de inmediato a tu banco y avisarle, también debes mantener tus dispositivos intactos para una posible inspección posterior. Además, deberás cambiar tus contraseñas y monitorear tus cuentas bancarias en busca de actividad sospechosa.