EAGLE PASS, Texas. – Tras el anuncio y la instalación de boyas en 300 metros del Río Bravo, el Gobierno de México envió una nota diplomática a Estados Unidos para manifestar su preocupación por la instalación del muro flotante.
Gobierno de México reclama a Texas por “violar el tratado de límites y aguas” al colocar ‘muro flotante’ en Río Bravo
En una nota diplomática, el Gobierno de México expresó su preocupación por la colocación del muro flotante con boyas sobre el cauce del Río Bravo, por parte del Gobernador de Texas Greg Abbott. La Secretaría de Relaciones Exteriores expresó que esta medida está contraviniendo el tratado de límites y de aguas.
Por:Univision
Video Llegan boyas al Río Bravo para comenzar a construir el 'muro flotante' contra inmigración
Alicia Bárcena, titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores de México (SRE), informó que habían enviado al Gobierno de Estados Unidos una nota diplomática por violar los tratados de aguas y de territorio con la instalación de las boyas y alambres de púas cerca del cauce del Río Bravo.
“En realidad lo que se está violando es el Tratado de Aguas de 1944, y por eso estamos mandando una Misión de Inspección Territorial a través de la Comisión Internacional de Límites y Aguas, pues para definir en dónde se están ubicando estas boyas, qué es lo que está pasando, y, por supuesto, llevar adelante este levantamiento topográfico para verificar que no atraviesen el territorio mexicano”, explica.
La misma SRE informó en un comunicado de prensa mencionan que la instalación de boyas, un cerco de alambre, colocación de barriles, desmonte y movimiento de tierras dentro del cauce del Río Bravo y cerca del Puente Internacional Ferroviario Piedras Negras-Eagle Pass podría violar ciertos tratados.
Dicen que la colocación de las boyas “contraviene al artículo 17 del Tratado de Aguas Internacionales de 1944, el cual establece que: ‘El uso del cauce de los ríos internacionales para las descargas de aguas de avenida o de otros excedentes será libre…”.
Además, pidieron que cualquier trabajo de desmonte deberá ser avalado por la Comisión Internacional de Límites y Aguas (CILA) entre México y Estados Unidos.
La Secretaría de Relaciones Exteriores cita el Tratado de Límites de 1970, donde establecen que los dos Gobiernos deben acordar o prohibir la construcción de obras en su territorio, cuando a juicio de la Comisión puedan causar desviación u obstrucción de la corriente normal del río o avenidas.
El Gobierno de México había solicitado el pasado 26 de junio a Estados Unidos que retire los alambres del cauce del río por “los efectos de obstrucción y desviación de los escurrimientos hacia territorio mexicano, y que en lo sucesivo no se siga considerando la zona de inundación y el cauce de este río para la instalación de los elementos mencionados”.
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La petición del Gobierno de México se suma a una demanda de un empresario contra el ‘muro flotante’
El dueño de un negocio de kayak había enviado una demanda contra el condado de Travis y en la que alegan que el Gobernador Greg Abbott no tiene autoridad para instalar el nuevo muro.
El empresario Jessie F. Fuentes, el dueño del negocio Epi’s Canoe and Kayak Team en Eagle Pass, que se dedica a dar tours y clases en el Río Bravo, alega en su demanda que perdería dinero con la instalación del muro fronterizo flotante.
El 8 de julio pasado, Carlos Flores, uno de los abogados que está a cargo del caso, dijo a Univision San Antonio que Abbott no tiene ningún fundamento para construirlo, ni con la ley del estado ni con la federal.
Esta barrera acuática consiste en boyas flotantes. La primera instalación mediría mil pies, con una profundidad de 4 a 6 pies dependiendo la zona donde se encuentre.
El muro no sería instalado en áreas donde no se registran tantos cruces de personas, sino en puntos donde, según Abbot, hay más cruces de inmigrantes.
