La cantidad de sal que hay en el agua puede hacer la diferencia entre flotar o no y la posibilidad de hundirse con mayor o menor facilidad cuando entramos al agua. Con un sencillo experimento te mostramos en qué situación es más fácil flotar: en agua dulce o en agua salada. Además, te explicamos cómo esto puede mostrarte los peligros de los ríos y del mar en el norte de California.