Pena de muerte
Pena de muerte en Florida: Por asesinato y violación cometidos en 1988, fue ejecutado Richard Barry Randolph
Florida renudó las ejecuciones en 2025. En 2024 solo hubo una ejecución en el estado, mientras que en 2023 se registraron seis.

El 20 de noviembre de 2025 fue ejecutado, por un crimen que ocurrió en agosto de 1988 en una tienda Handy-Way de Palatka, Richard Barry Randolph. El convicto había trabajado previamente en el lugar, intentó abrir la caja fuerte del negocio fuera del horario laboral. La gerente, Minnie Ruth McCollum, lo sorprendió mientras intentaba forzar el acceso. Ambos comenzaron a forcejear dentro de la tienda. Durante el ataque, Randolph golpeó violentamente a la mujer, la estranguló, la apuñaló en varias ocasiones y también la violó antes de huir. Después del ataque, Randolph robó el automóvil de la víctima y salió del establecimiento. Tres mujeres que pasaban por el sitio lo vieron irse y notaron que la tienda estaba en desorden, por lo que llamaron a las autoridades. Un agente del sheriff llegó poco después y encontró a McCollum aún con vida, pero en estado crítico. Fue trasladada a un hospital, donde entró en coma y murió seis días después a causa de lesiones cerebrales severas provocadas por la brutal agresión. Randolph fue detenido poco después mientras intentaba canjear boletos de lotería robados del mismo comercio. Confesó el ataque y reveló dónde había arrojado su ropa ensangrentada.
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Bryan Frederick Jennings fue ejecutado el 13 de noviembre porque, tras un proceso judicial de varios años y múltiples apelaciones, la justicia confirmó su responsabilidad en el secuestro, abuso y homicidio de una niña en 1979. Un jurado lo condenó a muerte y las cortes mantuvieron esa sentencia. Al agotarse todos sus recursos legales, el estado cumplió la orden de ejecución establecida por la ley.
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Norman Mearle Grim fue ejecutado el 28 de octubre de 2025, en la Prisión Estatal de Florida. La sentencia se cumplió porque fue declarado responsable de la agresión sexual y homicidio de su vecina Cynthia Campbell en 1998, delitos por los que fue condenado en 2000. Tras renunciar a nuevas apelaciones y agotarse sus recursos, el estado llevó a cabo la ejecución.
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Samuel Lee Smithers, de 72 años, fue ejecutado en la prisión estatal de Florida por el asesinato de dos mujeres en 1996, en un caso que marcó la decimocuarta aplicación de la pena de muerte en el estado durante 2025. Su ejecución, rechazada por las cortes pese a su edad avanzada, convirtió a Florida en el estado con más ejecuciones del país este año, bajo la administración del gobernador Ron DeSantis.
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Victor Tony Jones fue condenado a la pena de muerte por el asesinato de Matilda y Jacob Nestor en diciembre de 1990, en Miami-Dade. Jones, recién contratado como empleado en el negocio de la pareja, intentó robarles y durante el asalto apuñaló a Matilda en el cuello y a Jacob en el pecho. A pesar de estar gravemente herido, Jacob alcanzó a disparar con una pistola calibre .22 e hirió a Jones en la frente, lo que permitió que la policía lo encontrara aún en la escena, con dinero y pertenencias de las víctimas en sus bolsillos. Hospitalizado y posteriormente juzgado, fue declarado culpable en 1993 de dos cargos de asesinato en primer grado y dos de robo a mano armada. El jurado determinó que el ataque había sido intencional y brutal, lo que llevó a su sentencia de muerte, confirmada tras décadas de apelaciones fallidas.
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David Pittman asesinó en mayo de 1990 a sus suegros, Clarence y Barbara Knowles, y a su cuñada Bonnie, de 21 años, en Mulberry, Florida. Antes del ataque, cortó la línea telefónica de la casa, luego apuñaló a las víctimas, incendió la vivienda y robó el auto de Bonnie, que también quemó. El crimen ocurrió en medio de un divorcio conflictivo y tras varias amenazas a la familia de su esposa.
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Kayle Bates fue ejecutado por asesinar a Janet White en 1982. La secuestró de su oficina, intentó violarla, la apuñaló hasta matarla y le robó un anillo. Fue condenado por asesinato en primer grado, secuestro, robo a mano armada e intento de agresión sexual. Tras agotar sus apelaciones, Florida procedió con la inyección letal en 2025.
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Edward Zakrzewski fue condenado a muerte por asesinar brutalmente a su esposa Sylvia y a sus dos hijos pequeños, Edward y Anna, en 1994 en Okaloosa County, Florida. Según el juicio, cometió el crimen tras enterarse de que su esposa quería divorciarse. La atacó con una barreta, la estranguló y la remató con un machete, el mismo con el que mató a los niños. El jurado recomendó la pena de muerte en una votación dividida de 7-5.
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Florida ejecutará a tres reos entre el 31 de julio y el 28 de agosto de 2025, todos condenados por homicidios brutales cometidos entre 1982 y 1994. Edward Zakrzewski, Kayle Bates y Curtis Windom recibirán la inyección letal tras décadas en el corredor de la muerte. Con estas acciones, el estado se consolida como el líder en ejecuciones este año.
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Michael Bernard Bell fue ejecutado el 15 de julio de 2025 mediante inyección letal en la Prisión Estatal de Florida por el asesinato de Jimmy West y Tamecka Smith en 1993. La ejecución ocurrió a las 6:25 p.m., con 22 testigos presentes, entre ellos familiares de las víctimas. Sus últimas palabras fueron: “Gracias por no dejarme pasar el resto de mi vida en prisión”. Con este caso, Florida suma ocho ejecuciones en 2025, liderando el país en número de penas de muerte aplicadas hasta ahora.
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Thomas Gudinas, ejecutado el 24 de junio de 2025. Michelle McGrath fue vista por última vez saliendo de un bar en Florida en 1994. Horas después, su cuerpo fue hallado en un callejón cercano, con señales de agresión sexual y heridas graves. Thomas Gudinas fue identificado como el agresor y condenado a muerte por su violación y asesinato.
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Anthony Wainwright estáfue ejecutado el 10 de junio de 2025. El gobernador republicano de Florida, Ron DeSantis, firmó la orden de ejecución dereo, de 54 años, condenado por el secuestro, violación y asesinato de Carmen Gayheart en 1994. La víctima fue raptada en el estacionamiento de un supermercado en Lake City. Según documentos judiciales, Wainwright había escapado previamente de una prisión en Carolina del Norte junto con otro recluso y fue capturado en Mississippi tras un enfrentamiento armado con la policía.
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Glen Rogers, un presunto asesino en serie, que alguna vez fue investigado por un posible vínculo con el caso de O.J. Simpson. El 15 de mayo de 2025 fue ejecutado este hombre que captó la atención nacional en los años 90, por un asesinato ocurrido en Florida. Glen Rogers, de 62 años, recibió una inyección letal la noche del jueves por el asesinato en 1995 de Tina Marie Cribbs, una madre de dos hijos de 34 años. Un documental de 2012 sobre Rogers planteó preguntas sobre una posible conexión con los asesinatos en 1994 de la exesposa de Simpson y su amigo. Las autoridades afirmaron posteriormente que no creían que él estuviera involucrado. En su juicio de 1995, Simpson fue absuelto de todos los cargos. Sin embargo, más tarde fue hallado responsable de sus muertes en un caso civil separado. Simpson murió en 2024 a los 76 años.
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Jeff Hutchinson fue el cuarto reo ejecutado en Florida en 2025, acusado de asesinar a su pareja y tres niños. Los hechos ocurrieron en Crestview, la noche en que Hutchinson discutió con su pareja, Renee Flaherty, de 32 años. Según los registros judiciales, después de la discusión, empacó armas y ropa en su camioneta y se dirigió a un bar, donde comentó que Flaherty estaba enojada con él. Poco después, una llamada al 911 desde su residencia anunció: “Acabo de dispararle a mi familia”. La policía encontró a Hutchinson en el garaje de la casa, con residuos de pólvora en las manos y el teléfono aún conectado con emergencias. En el interior, yacían los cuerpos de Flaherty y sus tres hijos: Geoffrey (9), Amanda (7) y Logan (4), todos muertos por disparos de escopeta. El arma fue hallada sobre una encimera de la cocina.
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Michael Tanzi, condenado por secuestrar y asesinar a Janet Acosta en 2000, fue ejecutado el 20 de abril. Tanzi, de 48 años, enfrentó su destino tras pasar más de dos décadas en el corredor de la muerte. El crimen que condujo a esta condena ocurrió en abril de 2000, cuando el reo, en un acto de violencia extrema, secuestró a Janet Acosta durante su receso de almuerzo. La víctima, una trabajadora de producción del periódico Miami Herald, se encontraba en su camioneta leyendo un libro en el estacionamiento del trabajo cuando Tanzi se le acercó. Según los registros judiciales, el criminal le pidió un cigarrillo y, de manera sorpresiva y violenta, comenzó a golpearla en la cara. Tras el ataque inicial, Tanzi la obligó a subirse a su vehículo y la trasladó a los Cayos de Florida. Una vez allí, Tanzi continuó su brutal agresión. La golpeó, le robó sus pertenencias y, finalmente, la estranguló hasta la muerte. Después de cometer el asesinato, Tanzi abandonó el cuerpo de Acosta en una isla aislada, donde fue encontrado posteriormente por las autoridades.
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El 20 de marzo, Edward James se convirtió en el segundo reo ejecutado en Florida por el asesinato de una niña y su abuela ocurrido en 1993. James fue condenado por los asesinatos de Toni Neuner, de 8 años, y su abuela Betty Dick, de 58, el 19 de septiembre de 1993 en la localidad de Casselberry. Esa noche, James había bebido hasta 24 cervezas, ingerido ginebra y consumido LSD durante una fiesta, antes de regresar a la casa en la que alquilaba una habitación. En el domicilio también se encontraban Toni y otros tres niños, quienes no fueron agredidos. Según los registros judiciales, James violó y estranguló a la niña, y apuñaló a la abuela 21 veces. Luego robó sus joyas y el automóvil de la víctima, emprendiendo una fuga a través del país. Durante el trayecto, vendió parte de las joyas robadas. Fue detenido el 6 de octubre de ese mismo año en Bakersfield, California, y confesó sus crímenes en una grabación en video obtenida por la policía.
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James Dennis Ford fue el primer reo ejecutado de 2025, el 13 de febrero, por asesinar a una pareja frente a su bebé en 1997. La pareja tenía poco de haberse casado y el asesinato ocurrió durante un viaje de pesca en una granja en Charlotte County. Ford y Gregory Malnory eran compañeros de trabajo. La hija de la pareja, de tan solo 22 meses, sobrevivió en la escena del crimen durante 18 horas antes de ser encontrada cubierta de sangre y con múltiples picaduras de insectos. Según los documentos judiciales, Ford atacó a Gregory Malnory disparándole en la cabeza con un rifle calibre .22, luego lo golpeó con un objeto contundente similar a un hacha y finalmente le cortó la garganta. Posteriormente, violó, golpeó y asesinó a Kimberly Malnory con el mismo rifle.
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