NUEVA YORK - Para George Contreras, la mañana del 11 de septiembre del 2001 parecía una día normal.
En sus palabras, un paramédico cuenta los traumáticos momentos que vivió al rescatar a víctimas del 11-S
George Contreras pertenecía al batallón 49 de Nueva York cuando fue enviado a las Torres Gemelas tras el atentado. Recuerda los momentos más impactantes que vivió al rescatar a víctimas de ese día.
Por:
Damaris Díaz
Video “Sentí mucho miedo”: paramédico cuenta el trauma con el que vive tras rescatar a víctimas del 9/11
“Recuerdo que la temperatura estaba muy buena y simplemente pensé: ‘qué lindo día hoy’”, dijo George.
Pero en cuestión de minutos, esa tranquilidad se transformó en desesperación cuando su unidad en el batallón 49 de la ciudad de Nueva York fue enviada a las Torres Gemelas tras el impacto en la torre norte.
“Cuando llegué aquí, fue muy caótica la escena, las personas estaban huyendo de las torres, muchas personas [estaban] corriendo y gritando desesperadamente”, confiesa George.
George acaba de cumplir 30 años sirviendo en la ciudad de Nueva York como paramédico. De origen ecuatoriano, fue uno de los cientos de paramédicos que trabajaron como rescatista durante los atentados del 11 de septiembre.
“Para mi y muchas personas lo hacemos porque tenemos la vocación”, explica.
George es uno de los pocos que sobrevivió después de estar dentro del World Trade Center cuando ambas torres colapsaron.
“Confieso que sí sentí mucho miedo muchos instantes que pensé que iba a morir y dije bueno al menos voy a morir haciendo lo que a mi me gusta hacer”, cuenta George. Confiesa que al enfrentar la muerte, vio que la vida le pasó por delante, pensando en su familia y en cómo iba a cambiar el mundo para ellos.
Rodeado de los escombros, polvo y humo negro, George trabajó sin desmayo, rescatando víctimas y buscando a sus compañeros.
“Los bomberos cargan un sistema de alarma - que cuando no se mueven se escuchaban esos timbres - eso me lleva a ese día”, dice.
Dentro de los 412 trabajadores de emergencia de la ciudad de Nueva York que perdieron sus vidas en esa fatídica mañana, estuvo Carlos Lillo, compañero y amigo de George.
“Nos dividimos lo que íbamos a hacer ese día y después de ocho meses lo encontramos en los escombros” dice George.
Ya que cientos de los trabajadores de emergencia, como bomberos, policías y paramédicos que participaron en las labores de rescate han muerto después del 11 de septiembre por enfermedades provocadas por las partículas tóxicas que se liberaron tras desplomarse los edificios, este héroe dice vivir el día a día con temor.
“Estoy aprovechando lo más que pueda y gracias a Dios he estado bien pero no me puedo enfermar”, cuenta George.
Pero gracias a héroes como él, otros pueden contar sus historias de supervivencia tras los atentados del 11 de septiembre.
