"Van a llorar lágrimas de sangre": la amenaza previa a la misteriosa desaparición de una mujer

LOS ÁNGELES, California.- Los mensajes de texto que Cecilia Bravo Cabrera recibió en los días previos a su desaparición advertían su destino.

“Que la iba a desaparecer del mundo, que nadie de la familia se iba a dar cuenta, que su familia y sus hijos iban a llorar lágrimas de sangre”, contó Raquel Zamora, madre de la mujer que desapareció hace seis meses al salir de un casino en el condado de Tulare, en la región agrícola del valle central de California.

Los mensajes fueron recuperados por los detectives que investigan la desaparición y que forman parte de la evidencia con la que se establece que la madrugada del pasado 9 de junio, luego de salir del casino Tachi Palace, Cecilia fue asesinada.

Los principales sospechosos son Francisco Valdivia y su esposa Rosalinda López, una pareja de indocumentados mexicanos que dentro del negocio de tarimas de madera que tenían en la ciudad de Visalia, ocultaban plantíos de marihuana.

Valdivia también estaba casado con Cecilia, pero como parte de un arreglo matrimonial para que el hombre obtuviera documentos migratorios.

Aunque rara vez se les veía juntos, la noche que Cecilia desapareció habría visitado el casino ubicado en las tierrras tribales de los Tachi-Yokut en compañía de Valvidia.

A decir de Rigo Cabrera, hermano de la víctima que contó estos pormenores a Univision Noticias, Cecilia y Valdivia se conocieron en 2008 y “se entendieron”, tuvieron una relación y acordaron lo del falso matrimonio para conseguir la “green card”.

Ella sabía que estaba casado y que era padre de cuatro hijos, pero él le prometió que dejaría a Rosalinda, la mujer con la que se casó en Jalisco, México.

De charreadas y marihuana

Valdivia es reconocido en Tulare por organizar charreadas, fiestas con caballos y música de banda a las que que algunos llaman “mexican rodeo”, pero se volvió más famoso cuando cinco días después de la desaparición de Cecilia fue arrestado por los cultivos de marihuana.

Cecilia Bravo Cabrera, madre de cuatro niños, desapareció cuatro días antes de su cumpleaños 31, y se dedicaba a vender maquilla y accesorios para la mujer, un negocio que promovía a través de la página de Facebook Cecilia’s cosmetics n Accesories.

Aparentemente la relación entre Cecilia y Valdivia se mantenía entre las promesas que le hacía el hombre, hasta que Rosalinda habría descubierto la comunicación que sostenían vía teléfono celular.

Rosalinda, a quien algunos describen como “una mujer de armas tomar”, sería quien envió los amenazantes mensajes de texto luego de conseguir su número en el teléfono celular de su esposo.

Ella también era acusada por los cultivos a gran escala de marihuana, pero había evadido a las autoridades, por lo que a principios de noviembre la colocaron en la lista de los 10 fugitivos más buscados en el condado de Tulare.

El pasado 13 de diciembre Rosalinda fue detenida en una vivienda de Tulare y Valdivia retenido en la cárcel en la que se encontraba, acusados por el asesinato de Cecilia, aunque el cuerpo de la víctima no se ha localizado.

La visita al casino

Cuando visitaba el casino Tachi Palace, a 30 minutos por carretera de su casa, Cecilia solía pasar horas jugando y divirtiéndose en ese lugar que es uno de los principales atractivos en el valle central de California.

Por eso resultó extraño que aquella noche de junio que desapareció, Cecilia sólo hubiera estado muy poco tiempo dentro de ese salón de juego con su peculiar sonido de máquinas tragamonedas, como también fue raro que fuera acompañada de Valdivia, que saliera del lugar sola y que su auto fuera abandonado a 30 millas de distancia.

Cecilia salió de su casa alrededor de las 11:00 de la noche, supuestamente acompañada de Valdivia, pero abandonó el casino sola después de la medianoche, según observaron los detectives en la cámara de vigilancia que la captó.

La mujer habría abordado su vehículo, un Chevy Malibu 2013 color gris, el cual fue encontrado cinco horas más tarde envuelto en llamas en un huerto a orillas de la carretera y en las afueras de Goshen, a unas 30 millas de distancia del casino.

Desde hacía seis meses Cecilia estaba en calidad de desaparecida, hasta que esta semana los detectives del Sheriff de Tulare aseguraron que está muerta y que los responsables son Valdivia y Rosalinda, aunque aún no se tenga un cadáver.