"Lo necesito en mi vida": El dolor de tres niños ante la muerte de su padre por coronavirus en Los Ángeles

Los Ángeles, CA - Tres niños de la ciudad de Wilmington han quedado huérfanos luego de que su padre falleciera debido al coronavirus. Los pequeños aún lloran la muerte de su abuela, quien falleció hace solo semanas por la misma enfermedad, y ahora vivirán la primera Navidad sin su padre, quien los acompañó hasta su último suspiro.

"Yo estuve hablando con él, 'papá, despiértate' y no me hablaba pa' atrás", cuenta Mosés Amezcuas quien dormía con su padre en el misma cuarto aunque él estaba muy enfermo debido al coronavirus. El 10 de diciembre fue un día que el pequeño de 12 años nunca olvidará pues cuando se despertó no se imaginó que algo malo había pasado con su padre.

Abraham Amezcua, de 59 años, estaba al otro lado de la cama. Mosés no sabía que hacer, por lo tanto llamó a su tía Lupe "para decirle que mi papá no me habla, nada, y en ese momento ya sabemos que ya falleció".

"Le dio mucha tos y no podía controlar su respiración", dijo Lupe Amezcuas, tía de Mosés. El señor Amezcua murió víctima del covid-19, y dejó a tres hijos, Mosés y sus hermanos gemelos, Antonio y Sidney, de 11 años, quienes también dieron positivo al virus.

Hace tres semanas, el 25 de noviembre, la abuela de los menores también murió debido al coronavirus y complicaciones por Alzheimer. Su muerte ocurrió un día antes del día de Acción de Gracias. "Yo no trabajo porque yo me ofrecí a cuidarle los niños a mi hermano porque él era padre soltero", asegura Lupe.

Abraham trabajaba en el puerto de Los Ángeles, pero cuando se infectó con covid-19 tuvo que dejar su empleo y las cuentas de servicios y renta se acumularon. "Está atrasado en pagar la renta por unos tres meses", dijo Lupe.

Mosés asegura que no deja de pensar en él. "Yo le amo mucho y yo lo necesito en mi vida y yo quiero que él esté aquí conmigo todo el tiempo", dijo este niño, que a los 12 años enfrenta una dura realidad marcada por la pandemia.

A pocos días de la Navidad, el virus que tiene a California de rodillas ha cobrado la vida de más de 22,000 personas en el estado. Mosés, Antonio y Sidney siempre celebraron estas fiestas con el árbol, villancicos y rodeados por el cariño de su padre, quien, a pesar de las dificultades, estuvo con ellos hasta el final. "Es la primer Navidad que mi papá no puede estar aquí con nosotros, y yo le extraño mucho", dijo Mosés.

La familia necesita ayuda, por esto han establecido una cuenta de GoFundMe para poder pagar la enorme cantidad de gastos, entre estos los funerales de sus seres queridos, la renta y el pago de los servicios públicos que también se han acumulado.