HOUSTON, Texas. – Los números de inmigrantes indocumentados que buscan ingresar a Estados Unidos no están disminuyendo, pese a que en las últimas semanas la administración de Donald Trump, a través del fiscal general Jeff Sessions, ha implementado medidas severas para desalentar a quienes tienen intenciones de venir al país sin documentos.
El flujo de indocumentados por la frontera de Texas sigue alto, a pesar de la mano dura del gobierno de Trump
Los intentos de la administración Trump por desalentar la inmigración indocumentada parece no estar logrando su propósito. En la última semana las autoridades fronterizas de Texas reportaron la detención de más de 50 inmigrantes que trataron de ingresar de forma ilegal y organizaciones humanitarias de la frontera aseguran que cada día reciben más y más gente.
Por:Liliana Cadavid
La hermana Norma Pimentel, quien dirige un albergue en el Valle del Rio Grande en Texas donde presta ayuda humanitaria a inmigrantes, cree que las tácticas de esta administración para desanimar a la gente a venir, que son realmente crueles porque usan a las familias y a los niños, no van a funcionar.
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“Todos los días recibimos mucha gente y siguen viniendo porque en sus países la situación no ha cambiado, por el contrario, ha empeorado… La violencia es real, las circunstancias son tan difíciles que los padres de familia no tienen otra alternativa más que huir de esa realidad a pesar de todo lo que (los gobernantes) quieren hacer aquí para evitar que vengan”, dijo a Univision Noticias la hermana Pimentel.
Las cuentas de la religiosa coinciden con las cifras que reporta la misma Patrulla Fronteriza de Texas. La semana pasada, entre el 4 y el 8 de junio, la agencia detuvo a 55 inmigrantes indocumentados en incidentes diferentes.
El 4 de junio, agentes asignados al puesto de control de la autopista 59, en Laredo, encontraron a seis mexicanos escondidos dentro de una carga de gabinetes de madera en la parte trasera de un camión. Los cajones venían asegurados con correas desde el exterior y las personas viajaban apiñadas, expuestos a altas temperaturas y con falta de circulación de aire. Una ciudadana estadounidense que manejaba el vehículo fue arrestada y los inmigrantes fueron puestos en procedimientos de deportación.
Ese mismo día, diez indocumentados que viajaban apiñados en una camioneta deportiva (SUV) fueron descubiertos durante una parada de tránsito al sur de Laredo.
El 5 de junio, agentes fronterizos de la estación de Hebbronville, también en Laredo, rescataron a un ecuatoriano que se había perdido en un rancho cerca de la autopista 285.
"La mayoría de las personas que intentan ingresar ilegalmente al país no están preparadas para las rigurosas condiciones a las que se enfrentan", dijo Félix Chávez, jefe de patrulleros en el sector de Del Rio. "El calor extremo, el terreno traicionero y la indiferencia de los traficantes por la vida humana llevan a situaciones que amenazan la vida".
También el 5 de junio, 18 indocumentados que estaban escondidos en una casa de seguridad en el poblabo de Mission, Texas, fueron detenidos por agentes de la Patrulla Fronteriza, con la asistencia de oficiales del sheriff del condado Hidalgo. Los inmigrantes eran procedentes de Guatemala, México, Honduras, Nicaragua, Ecuador y El Salvador.
El 7 de junio, un inmigrante mexicano fue rescatado en el área de Havana, Texas, con la ayuda de un helicóptero de la Guardia Nacional que logró ubicarlo y guiar a los patrulleros en tierra. El hombre presentaba signos de deshidratación y fue tratado en el lugar.
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El 8 de junio, un grupo de ocho mexicanos fue descubierto dentro de un vehículo que se movilizaba por un vecindario del sur de Laredo. El conductor del auto, un ciudadano de Estados Unidos, intentó huir a pie, pero pronto fue aprehendido y encarcelado.
En otro incidente este mismo día, seis indocumentados procedentes de Brasil fueron descubiertos dentro de la cabina de un camión de carga que intentó cruzar por el puesto de control en la autopista 83 al norte de Laredo, Texas.
El 10 de junio, tres mujeres, un hombre y un niño fueron rescatados en el sector de Eagle Pass, luego de que la policía local fue alertada de una llamada a la línea de emergencias.
Solo en mayo, áreas fronterizas de Texas registraron altos aumentos de detenciones como Big Bend (un 78% más respecto al mismo mes del año anterior) y Laredo (48%). Además, el valle del Rio Grande sigue siendo, con diferencia, por donde más inmigrantes están cruzando de manera ilegal, según las cifras del gobierno.
Las autoridades fronterizas en Texas siguen insistiendo que es muy peligroso que los inmigrantes intenten ingresar de forma ilegal a territorio estadounidense durante la época de verano porque las altas temperaturas se suman a los riesgos que ya enfrentan al cruzar por terrenos agrestes y al lidiar con peligrosos traficantes.
La hermana Pimentel, quien por años ha escuchado las historias de los que cruzan, sabe que estas personas, en su gran mayoría, lo hacen porque la realidad en sus países es mucho peor.
“Van a seguir viniendo, pese a las altas temperaturas y todo lo que están haciendo las autoridades para desanimarlos… la gente seguirá esperando en el puente internacional (por una oportunidad de pedir asilo) a pesar del calor que hace y de todas las inconveniencias”, dijo.
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